Las obras de remodelación de la Plaza Nueva, en pleno centro de Alicante.ALICANTE. El despliegue del plan de inversiones contemplado por el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante (el bipartito compuesto por Partido Popular y Ciudadanos) a través de los presupuestos municipales de 2022 va a deparar el inicio de una batería de proyectos de reurbanización en varios puntos del Centro, del Ensanche y de otros barrios del término de la ciudad entre los meses de octubre y diciembre, en el momento en el que se complete la tramitación administrativa de sus respectivos procesos de contratación.
Se trata de un paquete de más de 114 actuaciones programadas con un presupuesto que supera los 70 millones, entre las que se incluyen los proyectos de calmado de tráfico y mejora de la movilidad peatonal incorporadas en la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que, al menos en parte, se pretende poner en ejecución de forma paralela antes de que finalice el año en lo que se avecina como un otoño caliente para el sector de la obra civil, con las consiguientes consecuencias sobre la movilidad urbana en forma de cierres o desvíos temporales de tráfico, aunque el desarrollo de muchas de ellas se estaría planificando por fases para tratar de minimizar molestias.
Todo sin contar las inversiones previstas para renovar los parques de El Palmeral, Lo Morant, Juan Pablo II o Sergio Melgares, el impulso al nuevo complejo deportivo previsto en el PAU 5 o la remodelación de la plaza de San Blas, por enumerar algunas de los proyectos de mayor calado por presupuesto y plazos de ejecución que, sin embargo, todavía no tienen fecha de inicio concreta.
Por el momento, entre esas obras de remodelación de viales que se encuentran más avanzadas figuran el proyecto de reurbanización del Paseo de lo Mártires de la Libertad, la generación de la nueva plaza en el fondo de saco de La Rambla como desarrollo de la tercera fase de reurbanización de La Explanada, la remodelación de la avenida de Ramón y Cajal, o los trabajos de reurbanización de las calles Sevilla, San Antonio, Marqués de Molins y Sargento Vaillo, de la avenida de Jijona, o de la Plaza Músico Óscar Tordera, casi todas ellas, con aportación de fondos europeos.
El bipartito prevé aprobar en la Junta Local de este martes la convocatoria del proceso para concertar la dirección de obra y coordinación de seguridad y salud de parte de ellas: uno de los últimos trámites pendientes para que la labor constructiva pueda comenzar a desarrollarse. Otras, como la reurbanización del Paseo de los Mártires de la Libertad -que puede llegar a ser simultánea a la renovación del paseo marítimo, promovida por el Puerto-, la de la avenida de Ramón y Cajal o la tercera fase de La Explanada ya están adjudicadas y correrán a cargo de Pavasal (las dos primeras) y de Tizor (la tercera) con lo que su inicio también se augura inminente.
La lista de intervenciones sobre algunos de los principales viales de la trama urbana del Centro se completa con las obras de remodelación del eje conformado por el paseo de Doctor Gadea y la calle General Marvá -entre el Parque de Canalejas y las escaleras del IES Jorge Juan-, que quedan subdivididas en distintos tramos, en los que también se prevé reducir carriles para aminorar la velocidad de la circulación.
Las vallas en la avenida de la Constitución.
La calle Bailén.
Dos vistas de la Plaza Nueva.La realización de la mayoría de esos trabajos se prolongará durante más de cuatro meses y algunas de ellas disponen de hasta ocho meses para completar su ejecución, siempre que no se produzcan contratiempos sobrevenidos que alarguen su finalización, como ha venido sucediendo ya en varias actuaciones previas como consecuencia del retraso en el suministro de materiales. Así, está por ver cuántas de ese paquete global de obras de transformación urbana llegan a estar terminadas antes de que se agote el actual mandato, en mayo de 2023.
Por lo pronto, otras intervenciones previas iniciadas durante la pasada primavera se aproximan ahora a la fecha de su finalización. Es el caso de la remodelación de la Plaza Nueva que, según fuentes municipales, debería quedar completada para el puente del 9 d'Octubre y de la Hispanidad. En principio, la conclusión de las obras podría quedar supeditada a la entrega del material previsto para los nuevos puntos de alumbrado y para la plantación de arbolado.
En una situación hasta cierto punto similar se encuentran las obras de peatonalización del eje formado por la avenida de la Constitución y la calle Bailén. Fuentes consultadas confirmaron que la intervención más compleja, que correspondía asumir a Aguas de Alicante, ya estaría prácticamente finalizada por lo que se prevé reanudar y acelerar la colocación del nuevo pavimento durante las próximas semanas. A priori, las obras debían quedar concluidas a finales de este año, pero todo parece indicar que los trabajos se extenderán al menos entre los meses de enero y febrero de 2023.
Entre tanto, el equipo de gobierno ya ha confirmado su pretensión de elaborar un nuevo presupuesto municipal para el próximo ejercicio con el fin de dar continuidad a los proyectos concebidos como actuaciones plurianuales para que puedan completarse, así como para volver a incorporar las inversiones que no se haya llegado a poner en ejecución antes de 31 de diciembre.
