ALICANTE. Derribo en proceso. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, el bipartito formado por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), da el paso definitivo y despeja el demolición del edificio de la escuela infantil municipal Siete Enanitos, cerrada desde el mes de marzo tras el hallazgo de daños estructurales (un hundimiento o deformación del suelo) que forzaron el realojo de los alumnos matriculados. Salvo cambio de última hora, el acuerdo de derribo debe quedar aprobado en Junta de Gobierno este martes, en función de la propuesta firmada por la ya exconcejal de Educación, Julia Llopis, tras el registro de su dimisión y renuncia al acta de concejal, este lunes, después de que trascendiese su incorporación a la candidatura autonómica de Vox ante las elecciones del próximo 28 de mayo.
El acuerdo de demolición del centro de la calle Barítono Paco Latorre será, así, la última de las iniciativas promovidas bajo la responsabilidad de Llopis que llegarán a deliberación al órgano de representación política en el que se adoptan la mayoría de las decisiones relacionadas con la gestión municipal. A partir de ahora, y hasta que pueda constituirse la próxima corporación municipal y el próximo gobierno, la responsabilidad sobre la materia recaerá en la actual edil de Empleo, Mari Carmen de España (PP).
De España ya asumió las competencias de Educación durante el último tramo del pasado mandato, desde abril de 2018, después de que el actual alcalde y candidato a la reelección, Luis Barcala, asumiese la Alcaldía como consecuencia de la dimisión del socialista Gabriel Echávarri. Y será ella quien tenga que velar por la puesta en marcha del cumplimiento de la segunda parte que -según fuentes municipales- también quedaría incorporada en la propuesta de acuerdo: la construcción de un nuevo centro en el mismo solar.
Esa fue, además, la decisión adoptada en el Consejo Rector del Patronato de Educación Infantil el pasado 23 de marzo, después de que se solicitase informe de valoración económica sobre el presupuesto necesario para acometer una posible reforma y reparación de las instalaciones actuales, así como sobre el coste de construcción de un nuevo centro con las mismas prestaciones. A la vista de esas dos valoraciones, se concretó que procedía acordar el derribo, como informó este diario.
En esa misma reunión del Consejo Rector, también se dio alas a la contratación de tres aulas prefabricadas (barracones) que pudiesen quedar instalados en el recinto de la segunda escuela infantil municipal, Els Xiquets, con el fin de poder acoger a los alumnos de Siete Enanitos desplazados tras su cierre. Esos barracones ya están posicionados en dicho emplazamiento con el propósito de que puedan albergar a los alumnos de forma temporal, bien hasta que se pueda disponer de un edificio público habilitado como espacio docente que pueda servir de alternativa, o hasta que se disponga del nuevo centro de Siete Enanitos. Hasta el momento, no se ha concretado plazos definitivos para ninguno de esos dos supuestos.
Por lo pronto, la propuesta de acuerdo planteada por la exregidora de Educación sí comprende el encargo a la Concejalía de Urbanismo para que disponga de la redacción de los proyectos necesarios tanto para la demolición del centro actual como para la construcción del nuevo edificio. Además, también se insta a la Concejalía de Hacienda a habilitar las partidas presupuestarias necesarias para ejecutar la demolición, así como para ejecutar las obras de la nueva escuela infantil.