ORIHUELA. La ciudad oriolana tendrá a partir de primavera, 36 viviendas en régimen de alquiler social listas para ser asignadas a personas con problemas al acceso habitacional. Así, al menos, esperan que sea, desde el Consell. El consejo de dirección de la Entidad Valenciana de Vivienda y suelo (EVHA), dependiente de la Consellería de Vivienda, cambió el régimen de uso del citado bloque de viviendas protegidas de Orihuela que estaban en venta en noviembre. Entonces, solicitaron al Ayuntamiento oriolano a autorizar este cambio de régimen de venta a alquiler. El Consistorio la ha aceptado y se prevé que en enero el cambio sea efectivo.
Antes de poner las viviendas a las personas demandantes de este alquiler, que deben reunir unos requisitos determinados para optar a ellas, se deben concluir las reparaciones y el mantenimiento y adecuación que, ahora mismo, están en marcha.
Precisamente, ayer, la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, destacó en la ciudad oriolana "el esfuerzo del Consell por reparar e impulsar viviendas protegidas que fueron abandonadas por gobiernos anteriores". Además, señaló que estas viviendas comenzaron a gestarse durante anteriores mandatos del PP en el Consell y lamentó que estos pisos se construyeran "en una etapa en la que la política pública de vivienda brillaba por su ausencia". La directora general de EVHA, Laura Soto, también acudió a la visita.
Estas declaraciones las realizó en la visita a las obras de mejora de este bloque de la calle Otelo de Orihuela. La Consellería licitó en agosto las obras de reparación de estas viviendas protegidas y de sus elementos comunes del edificio. La promoción está compuesta por 36 viviendas de dos y tres dormitorios, algunas tipo dúplex. Todas ellas tienen plaza de garaje y algunas trastero. Además, una está adaptada para personas con movilidad reducida.
La actuación, con un coste cercano a los 140.000 euros, se centra en la reparación de inmuebles que durante años han sido objeto de asaltos, robos de material, actos vandálicos o el deterioro propio de la falta de mantenimiento. Desde que acabaron las obras en 2011 no se han comercializado y desde entonces permanecen vacías. Los pisos carecían de mantenimiento durante años porque fueron abandonados al ser construidos para su venta y no haberse comercializado. Desde el Consell plantean que quizás, la ubicación no respondía a las necesidades de las personas que adquieren este tipo de inmueble.
Los trabajos de adecuación en marcha son, según Salvador, con el fin de que se conviertan en una opción habitacional más para quienes residen en Orihuela. "Las administraciones públicas deben construir viviendas protegidas y deben garantizar el derecho a la vivienda y no a dedicarse a la especulación", apuntó Salvador.
Por otro lado, EVHA dispone de otra promoción de 63 viviendas en Orihuela en la calle Clavo. En estos momentos, después de reducir los precios, se han logrado sacar buena parte de estas viviendas. Al menos, 55 de ellas ya se han escriturado, se han firmado otros cinco contratos de compraventa y había tres restantes pendientes de asignar, aunque ya podrían tener personas propietarias. Al principio del andato, tras negociaciones del Ayuntamiento de Orihuela con la entonces directora general de Infraestructuras, Blanca Marín, se vendieron 63 viviendas.
El portavoz adjunto del equipo de Gobierno, Rafael Almagro, a raíz de la vista de la consellera de Vivienda, apuntó que las viviendas de protección oficial de Orihuela Costa se construyeron antes de la crisis, "para cubrir la demanda que por aquel momento existía". Observço que el Ayuntamiento cedió en 2004 los terrenos para su edificación, "que por aquel entonces tenían un valor de unos 10 o 12 millones de euros".
Almagro aseguró que las 36 viviendas "se han puesto para venta o alquiler sin que nosotros lo aprobemos en el pleno municipal" y considera escasa la inversión de 140.000 euros para las reparaciones.