ALICANTE (EFE) Los honores a San Vicente Ferrer, la lucha contra el consumo de alcohol y la devoción mostrada por decenas de miles de alicantinos han destacado en la tradicional romería al monasterio de la Santa Faz, que este año cumple 529 ediciones. Se preveía un día nublado pero finalmente el sol ha brillado en el cielo, ofreciendo a los alicantinos otro día maravilloso de fervor y tradición coincidiendo con el año jubilar de San Vicente Ferrer, que comenzó el pasado lunes.
Junto a la sociedad civil, han participado algunos desde la misma catedral y otros desde la cercana plaza del ayuntamiento, diversas autoridades como el president de la Generalitat, Ximo Puig, el conseller de Economía, Rafael Climent, el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, la presidenta del PP en la Comunitat, Isabel Bonig, o la alcaldesa accidental de Alicante tras la dimisión de Gabriel Echávarri, Eva Montesinos, entre otros cargos autonómicos y locales.
El viento también ha sido protagonista, así como el fuerte dispositivo de seguridad, formado por 484 efectivos, de los cuales 280 son policías locales y 70 de ellos están destinados casi exclusivamente a evitar el consumo de alcohol, especialmente entre menores.
El dispositivo de seguridad en torno a la romería de Santa Faz de Alicante se ha saldado hasta las 18 horas con un total de 47 personas atendidas con heridas y el decomiso de 789 botellas de alcohol abierto. De esta manera, se ha logrado evitar el tradicional macrobotellón de jóvenes en la Playa de San Juan, que otros años se cifraba en unas 20.000 personas, y se han levantado un total de 250 actas, que conllevan una sanción de 90 euros cada una.
El operativo policial ha estado formado por 15 controles fijos y 30 móviles y, además de las 789 botellas de alcohol, que han sido destruidas, se han intervenido 100 litros adicionales que estaban cerrados.
El concejal de Seguridad, Fernando Marcos, ha destacado la "labor excelente" de la policía local "con una doble función: por un lado preventiva" y por otro punitivas mediante las sanciones por el consumo de alcohol en la vía pública, y también ha agradecido la labor de la Plataforma 0,0. Se han intervenido 9 carros de supermercados, que han sido retirados por un camión habilitado
"La peregrina", como se conoce a esta romería, ha arrancado con algo de retraso, sobre las 08.12 horas de esta mañana, desde la concatedral de San Nicolás de Bari con destino al Monasterio de la Santa Faz, a ocho kilómetros de distancia y adscrito a la Orden de las Hermanas Clarisas.
La peregrinación tiene su origen en el 17 de marzo de 1489 y viaja hasta el citado monasterio porque es allí donde se guarda uno de los pliegues del sudario que utilizó la Verónica para secar el rostro de Cristo en su camino al monte Calvario.
En declaraciones previas a la salida, Puig ha destacado la unidad de los alicantinos ante este evento, sean cuales sean sus ideas políticas, y ha calificado la festividad como propia de Alicante y llena de "sentimientos, raíces, vida y futuro"."Hoy se demuestra que todo el mundo está yendo hacia la Santa Faz con alegría, cada uno desde su pensamiento o mirada, pero todos intentando sumar a un proyecto colectivo de ciudad", ha subrayado.
Por su parte, tras la romería Montesinos ha agradecido que la mañana haya transcurrido "extraordinariamente bien" y sin incidentes, mientras que Marcos ha indicado que tan solo se han producido 25 atenciones por diversas afecciones sin gravedad, como cortes o ampollas. Los alicantinos seguirán llegando a la Santa Faz durante todo el día, ataviados con cañas y vestidos con el típico blusón negro de labrador y el pañuelo azul y blanco.