ALICANTE. Un futbolista del Intercity Sant Joan se encuentra en cuarentena después de dar positivo en la prueba PCR de Covid-19 a la que el club alicantino le sometía con carácter previo a la vuelta a los entrenamientos grupales para preparar el 'play-off' de ascenso a Segunda División B.
No se trata de único positivo en el vestuario del conjunto de Sant Joan toda vez que en los test serológicos también practicados entre el jueves y el viernes pasado a toda la plantilla, cuerpo técnico y auxiliares (unas 40 personas) otros dos futbolistas han dado positivo en anticuerpos, es decir, han pasado la enfermedad en las últimas semanas o meses.
La identidad de los afectados no ha trascendido por el momento pero sí que los dos positivos en anticuerpos son negativo en la PCR y, por tanto, podrán entrenar junto al resto de sus compañeros, al tiempo que el futbolista positivo en Covid-19 no solo se encuentra en aislamiento en su domicilio, especialmente que es asíntomático.
Gasto extra
Las citadas pruebas han tenido un coste total para el Intercity que ronda los 7.000 euros (que no asume la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) pese a exigirlas como requisito previo a la vuelta a los entrenamientos (sí corre con los gastos de una segunda tanda de test serológicos a realizar el día anterior al inicio del 'play-off' de ascenso), cantidad que se suma al exceso en gasto presupuestado por la prolongación de la temporada hasta finales de julio, algo que la asesora jurídica de clubes y deportistas, Irene Aguiar, cuantifica en iusport.com de la siguiente manera:
Lo anterior lleva a un gasto extra de 167.100 euros en Segunda B y de 63.000 euros en Tercera División, pero teniendo presente que en la primera de esas dos categorías hay presupuestos muy variados, por lo que algunos clubes a cuadruplican las mencionadas cifras.
Es importante tener presente que lo anterior (el excedido) no solo afecta a los clubes que compiten en el 'play-off', también lo hace al resto puesto que la temporada 2019/20 en ambas categorías no finaliza hasta que lo hace el último de los partidos de las diferentes fases de ascenso:
La RFEF y el CSD se lavan las manos
Después de dar a conocer la identidad de los clubes de Segunda B y Tercera con derecho a disputar las diferentes fases de ascenso, la RFEF también publicaba este lunes las circulares 70 y 71 por las que les trasladaba las directrices del Consejo Superior de Deportes (CSD) respecto a la vuelta a los entrenamientos grupales (sesiones que solo son posibles en territorios que se encuentren en la Fase 2 de la famosa desescalada) y el procedimiento de inscripción en los 'play-off'.
Además de recordar a los clubes "la importancia de cumplir con todas las medidas en las instalaciones respecto a los accesos, circulación, dispensadores de gel hidroalcohólico así como control, limitación de aforos y desinfección", la circular 70 establece que "no es necesario contar con un protocolo específico para cada una de las instalaciones deportivas" siempre que se respeten los requisitos mínimos exigidos por el Ministerio de Sanidad en sus diferentes Órdenes (especialmente la SND/414/2020 de 16 de mayo). Lo hace dando traslado de un escrito del director general de Deportes, Mariano Soriano, en el que no solo se descarga toda responsabilidad en el titular de la instalación en la que el equipo en cuestión entrene (la inmensa mayoría son de titularidad municipal y sin uso exclusivo), es que se exige a los clubes a remitir al CSD un "formulario obligatorio" en el que estos declaran que cumplen todos los requisitos recogidos en la citada Orden de Sanidad y en la Resolución de 4 de mayo de 2020, de la Presidencia del CSD por la que se aprueba por la que se aprueba y publica el "Protocolo básico de actuación para la vuelta a los entrenamientos y el reinicio de las competiciones federadas y profesionales".
Pero por si con lo anterior no hubiera bastante, en relación con la inscripción en la fase de ascenso, en su circular 71 la RFEF obliga a los clubes a suscribir entre otros documentos uno "de sujeción voluntaria a las normas de competición y de los 'play-off' de ascenso" en cuyo clausulado se dice expresamente: "El club conoce las circunstancias excepcionales actuales, los protocolos y las normas establecidas para garantizar la salud y seguridad de todos los participantes antes, durante y con posterioridad a la disputa del 'play-off' (...) Dicho lo anterior, siendo interés de esta parte su participación, y habiéndose tomado todas las medidas al efecto, exime de forma expresa la RFEF de cualquier responsabilidad que traiga causa de la situación sanitaria existente".
En ese mismo formulario que acompaña a la circular 71 se hace referencia a la necesidad de someter a test serológicos a plantilla y cuerpo técnico con carácter previo al inicio de los entrenamientos grupales y al inicio de la fase de ascenso. Mientras que los primeros test corren por cuenta de los clubes, la segunda tanda la asume la RFEF "para todos los miembros del Club con licencia federativa" y habrá de realizarse "en las sedes propias o concertadas de la Mutualidad de Futbolistas Españoles".
Sin posibilidad de entrenamientos grupales por ahora
Los conjuntos de la territorial valenciana que disputarán el 'play-off' de ascenso a Segunda B son el Alcoyano y el Intercity de la provincia de Alicante y al Alzira y el Atzeneta de la de Valencia.
Al tratase de dos provincias que no pasarán la fase 2 de la desescalada hasta el lunes 1 de junio como pronto (la Generalitat tiene intención de solicitarlo al Ministerio de Sanidad que es el que decide), ninguno de los cuatro equipos puede ejercitarse todavía en grupo (los jugadores lo hacen de manera individual).
Por el momento, el Intercity es el único club de los anteriores que ha hecho la preceptiva tanda de test (en su caso serológico y PCR).