ALICANTE. La plantilla del Hércules se ejercitaba este miércoles por primera vez bajo las órdenes de Claudio Barragán y Ramón Villagordo.
Los asistentes a la sesión de entrenamiento realizada en el estadio de atletismo destacaban el incremento en la carga física y, especialmente, la intensidad que le imprimió a todo lo relacionado con el balón el técnico valenciano, no dejando un mínimo espacio a la relajación, con correcciones constantes.
A Nacho Navarrete lo anterior no le cogió por sorpresa. El jugador que tuvo a Claudio como entrenador en el Cádiz, señalaba tras el entrenamiento que el nuevo inquilino del banquillo blanquiazul "exige mucho y aprieta al máximo, por lo que no se puede relajar ninguno". En unas declaraciones recogidas por EFE, el mediocentro chileno aseguraba que les había pedido que "lo dieran todo en los partidos y en los entrenamientos" y que, como ya adelantó el propio Claudio en su presentación, "todos parten de cero (...) va a jugar el que esté mejor de forma y se mate en los partidos".
Navarrete, que se refería al primer entrenamiento con el nuevo técnico como "más físico de lo habitual", entendía que la llegada de un nuevo entrenador es un "toque de atención a la plantilla".
Además de Navarrete, Samuel, Juli y Óscar Díaz ya habían trabajado bajo las órdenes de Claudio cuando vistieron la camiseta del Elche.