CASTELLÓ. A partir de ahora Castellón, València y Alicante contarán con su propio "Camino de Santiago". Una ruta singular que dotará de insignias a todo aquel que pase por los 24 municipios que incluye la bautizada como Ruta 99. No son, por supuesto, pueblos escogidos al uso. Se trata, en efecto, de aquellos pueblos de la Comunitat Valenciana que cuentan con menos habitantes. Pueblos que no llegan al centenar de vecinos y que, en algunos casos, por no tener no tienen ni bar. Sin embargo, lo que quiere demostrar esta ruta es que por más pequeño que un pueblo sea, hay mucha vida y estímulos en su interior. "Especialmente, durante los fines de semana cuando los familiares que trabajan en otros municipios regresan".
Así lo pudo comprobar la fotógrafa de Valencia Plaza, Marga Ferrer, quien recibió el encargo por parte de la Generalitat de fotografiar cada uno de los municipios que incluye el plan. A través de la muestra La mirada interior, Ferrer pone rostro al interior de la Comunitat, pueblos hoy en riesgo de despoblación que, no obstante, contienen rutas, senderos y un paraje natural digno de visitar. "Los pueblos son postales. La gente es amable y acogedora. Además, tenemos la idea preconcebida de que en los pueblos solo hay personas mayores, pero también va mucha gente joven y niños. No queremos faltar a la verdad. Las fotografías demuestran que hay vida en los pueblos y no solo son ruinas o castillos, porque si algo es evidente es que estos pueblos tienen un potencial histórico y cultural impresionante", asegura la profesional.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha presentado este mismo martes el proyecto en Castelló, puesto que es dicha provincia la zona que más municipios en riesgo de despoblación contiene. En concreto, son 17 de 24 los municipios de Castellón que atravesará la Ruta 99: Herbés, Palanques, Vallibona y Villores (comarca de Els Ports), Castell de Cabres (Baix Maestrat), Higueras, Matet, Pavías, Sacañet, (Alto Palancia), Espadilla, Fuente la Reina, Fuentes de Ayódar, Torralba del Pinar, Torrechiva, Vallat, Villamalur y Villanueva de Viver (Alto Mijares). Mientras que de València forman parte, desde el Rincón de Ademuz, Puebla de San Miguel y, desde La Vall d'Albaida, Sempere y Carrícola. Por último, en Alicante la ruta se extiende hasta el Comptat, en Benillup, Benimassot, Famorca y Tollos.
La Ruta 99 proporcionará una credencial a los viajeros y viajeras que quieran sumarse a su aventura. Además, como ocurre con el Camino de Santiago, se podrá sellar en cualquiera de los municipios que forman parte y no importa si quien la recorra, lo haga en moto, bici o a pie. Lo importante será superar las distintas etapas.
Por su parte, los diferentes municipios esperan con esta actividad una oportunidad para poder mejorar sus servicios. Conseguir que muchos tengan transporte o cajeros, entre otras medidas, son las soluciones que a corto plazo la administración deberá resolver para que la experiencia turística no quede únicamente en esto, en un estímulo para el que llega, pero no para el que se queda.
En este sentido, aseguraba Puig, junto a la directora general de la Agenda Valenciana Antidespoblament (AVANT), Jeannette Segarra, que la iniciativa forma parte de la Agenda 20-30, que constituye "el Libro Blanco contra el despoblamiento valenciano y que muestra la vía hacia el doble objetivo de evitar que nadie se vaya de su pueblo por falta de oportunidades y de mejora de la calidad de vida en todos los rincones de la Comunitat". Entre otros programas, a través de AVANT, la Generalitat ya ha empezado a instalar cajeros automáticos en zonas despobladas y mediante el proyecto Reviu se está tratando de mantener abiertos colegios y otras actividades básicas. Así mismo, la administración ha llegado recientemente a un acuerdo por el que se instalarán 141 cajeros vinculados a Correos en zonas despobladas.
"La Ruta 99 nace frente al mantra de la España vacía y hará visible que los pueblos de interior de la Comunitat no están vacíos sino llenos de vida, de valores y de oportunidades", ha reiterado el president de la Generalitat, quien sostiene que "cambiar el relato derrotista sobre estas poblaciones hacia un relato positivo", será el primer paso.
Con todo, la Ruta 99 no está cerrada. Aunque no hay más municipios con menos de cien habitantes en la Comunidad Valenciana, en un futuro se sumarán al proyecto otras localidades que, con un poco más de población, también cuentan con pocos vecinos y recursos. Así mismo, el proyecto ya ha puesto en marcha una segunda fase en la que el objetivo será sumar ahora a esos establecimientos que serán considerados 'Amigos de la Ruta 99'. Y es que, a través de su página web, se dará al visitante todo tipo de información sobre los pueblos; desde las rutas o patrimonio que estos abrazan hasta los sitios que quedan cerca para comer o cenar.
Entidades como Correos o el IVAM se han sumado a la causa. Y para la promoción de la ruta se ha contado con la banda valenciana Bajoqueta Rock, que ha compuesto un tema específico. Por su parte, el trabajo de Marga Ferrer formará parte de una exposición itinerante que recorrerá diferentes espacios de arte. "Hay que acabar con esa idea equivocada que tenemos de los pueblos despoblados, porque muchas veces es una imagen que nos llega de otros puntos de España. Aquí sigue siendo el Mediterráneo, no hace tanto frío y por más distancia que se tenga, no estamos a 200 kilómetros de ellos", ha sentenciado la fotógrafa.