El edificio del Mercado de Elche. Foto: PEPE OLIVARESELCHE. Mientras que el Ayuntamiento a priori no debe tardar demasiado en licitar el proyecto de ejecución de la rehabilitación del Mercado Central y entorno, porque los plazos eran de tres meses una vez adjudicado el proyecto básico, ya avanzado, y la administración local sigue dando varios pasos paralelos en el marco del Estudio de Integración Paisajística. Se ha impulsado una consulta pública en la web municipal para que cualquiera pueda participar e indicar su opinión acerca del proyecto y el entorno.
La actuación no solo pretende rehabilitar el inmueble, contando con que ello sirva de acicate para "dinamizar el comercio de proximidad en el centro histórico", sino que también implica reurbanizar el entorno y mejorar su integración con el yacimiento arqueológico de los Baños Árabes y los refugios antiaéreos de la Guerra Civil situados bajo la plaza.
La encuesta pregunta acerca del nivel de formación, edad, profesión o la relación con la zona de ámbito de estudio, precisamente para recoger opiniones sobre qué se debería tener en cuenta de cara a la materialización de la obra. Y entrando en materia urbana, se pregunta por cuestiones de distinta índole, acerca de la percepción de las dotaciones existentes e infraestructuras varias: deportivas, culturales, sanitarias, mobiliario, información, (el tan mencionado en este proyecto) aparcamiento...
Además, también se pregunta por el uso que debería tener, las posibles actividades, o cuáles son los elementos distintivos del entorno con respecto a otras partes de la ciudad. También por elementos que afecten al propio paisaje de la zona. Y por último qué valor se le atribuye al Mercado y a elementos de todo el entorno, como la Calahorra, basílica de Santa María, palmeral, etc.
Sobre el proyecto de diseño, se adjudicó en noviembre a Tomás Llavador Arquitectos por 301.000 euros. Una iniciativa que en el diseño solo contempla los locales de ocio y hostelería, pero que ahora tendrá que integrar a los placeros, que se reunirán con el despacho y Ayuntamiento para determinar su encaje. Mantiene el perfil racionalista que diseñó Santiago Pérez Aracil.
