ELCHE. Después de haber sido el primer laboratorio en crear un kit genético para detectar la Covid-19, la ilicitana genetic PCR solutions™ trabaja ahora en el que podría considerarse 'test definitivo', un test de detección del coronavirus de fiabilidad genética, es decir, con una fiabilidad cercana a la de la PCR, que es del 100%, y rápido. Los resultados podrían estar en treinta minutos. Rápida por el tiempo, obviamente, pero sin tener nada que ver con los conocidos "test rápidos" que se están realizando y que son serológicos, detectan una partícula del virus en la cubierta de este. La compañía espera poder tener unos resultados preliminares en unos tres meses, en verano, y serían portables, por lo que no haría falta ni maquinaria avanzada ni personal específico, ni que la prueba se realice en un laboratorio; podrían tener lugar en centros de salud y Atención Primaria.
Como señala el doctor en Microbiología y director de la empresa, Antonio Martínez-Murcia, no se trata de una técnica PCR (Reacción en cadena de la Polimerasa), que han utilizado para detectar más de 300 patógenos —como el zika—, sino que "utilizando una estrategia molecular distinta y métodos desarrollados nosotros, pretendemos tener una respuesta en 30 minutos desde el ensayo de la muestra". Una estrategia diferente, pero también basada en genética y que permite que sea de mano, por lo que además de la precisión, al realizarse en centros de salud o Atención Primaria, "habría gran capacidad de llegar al ciudadano".
En contraposición, el problema que presenta la prueba PCR es que para utilizarla hacen falta laboratorios, máquinas específicas y personal cualificado. "Queremos simplificar el método para que tenga fiabilidad genética pero en campo —en jerga biológica, fuera de laboratorios,—, con un aparato pequeño". Aunque añade que la PCR también se puede simplificar. En cualquier caso, el proyecto se está trabajando a nivel internacional. Como relata el doctor, en él también participan ingenieros de Edimburgo. Se están encargando de desarrollar una aplicación que podría actualizar en tiempo real el resultado del test y enviar los datos al Centro de Emergencias pertinente. Recibiría al momento los análisis y el propio usuario podría conocer si ha dado positivo o negativo.
En resumidas cuentas, Martínez-Murcia apunta que un test así sería "muy positivo en una pandemia como la actual", ya que se podría volver a trazar la evolución del coronavirus, "aunque llegamos tarde", apunta. No obstante, para la presumible situación de levantamiento progresivo del confinamiento que llegará en los próximos meses, "vendría genial, porque no estamos libres de cualquier repunte u oleada". Además, señala que este test no solo sería pionero en España, sino a nivel internacional, "aunque para otros organismos hay alguna cosa parecida". Teniendo en cuenta que hay muchos laboratorios a nivel internacional trabajando en diferentes aspectos sobre la Covid-19, puede que algún laboratorio esté también tratando con algo parecido, pero aún no se conoce. "Y como se trata de otro reactivo, tendríamos un mercado inmaculado", añade.
Asimismo, como con todas las pruebas in vitro en humanos, primero habría que superar la parte preliminar en verano y después que el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) diera el visto bueno, como hizo en marzo. Se adaptarían las pruebas a la maquinaria existente fuera de laboratorios, dejando los kits "listos para meter solo la muestra". Al contrario de la PCR, que necesita un proceso de dispensador y reactivos, con este nuevo kit, cada tubo de análisis llevaría todos los componentes, únicamente habría que introducir la muestra. Y podrían encargarse personas que no tengan especialización, "tan solo unos mínimos de manejo de una muestra en un tubo, un hisopo, añadir líquido y el aparato". Según el doctor, "tenemos experiencia suficiente para considerar que llegaremos con éxito. Como será una prueba genética, creemos que la fiabilidad sería muy parecida a la de la PCR, pues es la base genética la que otorga dicha fiabilidad".
Asimismo, el ISCIII abrió una línea de ayudas para proyectos por la Covid-19 y que han solicitado, aunque están a la espera de que revisen el proyecto y les den el visto bueno para comercializar. En cuanto al primer kit PCR, se siguen distribuyendo por hospitales de Catalunya, Castilla y León, Madrid o Comunidad Valenciana, y tienen stock para asegurar la distribución, con una capacidad de producción de 500 kits a la semana a la semana —cada uno tiene 100 ensayos, es decir, podrían hacer 50.000 pruebas—, y asevera que incluso han encontrado la manera de fabricar más a la semana. De momento, el siguiente hito es validar este test definitivo que podría estar listo en tres meses si todo sale según lo previsto.