ALICANTE (EFE). Las empresas que ayuden a sufragar la salida de la regata The Ocean Race (Vuelta al Mundo a Vela), que partirá el 15 de enero de 2023 desde el puerto de Alicante, contarán con importantes beneficios fiscales por tratarse de un evento de excepcional interés público.
Así lo han trasladado hoy desde la Sociedad de Proyectos Temáticos de la Comunitat Valenciana (SPTCV), que gestiona la salida de la regata y el Race Village, en un acto celebrado en Ciudad de la Luz con un centenar de empresas e instituciones interesadas en patrocinar o colaborar económicamente con esta prueba, que preside Richard Brisius.
The Ocean Race saldrá el 15 de enero aunque durante los nueve días previos habrá numerosas actividades relacionadas y promocionales en el Race Village, en una edición que será la número 50 desde que se estrenó esta prueba deportiva extrema en la que los barcos circunnavegan el planeta a vela durante seis meses.
El director general de SPTCV, Antonio Rodes, ha asegurado que la salida de The Ocean Race será un evento "extraordinariamente rentable" con un retorno tanto directo como indirecto.
Desde el punto de vista turístico, el secretario autonómico de este área, Francesc Colomer, ha afirmado que la salida de la regata es "tremendamente positiva" para Alicante porque posiciona a la ciudad como destino de vacaciones y proyecta su marca en todo el planeta.
"The Ocean Race es un caballo ganador porque todos ganan", ha sostenido ante los empresarios antes de que el presidente de la carrera, Richard Brisius, pidiera el apoyo empresarial para un evento deportivo que tiene en Alicante su "hogar desde 2009", cuando salió la primera de las cuatro regatas que ha albergado esta prueba extrema en la que los barcos dan la vuelta al mundo a vela durante seis meses.
Ha indicado que uno de los valores de patrocinar The Ocean Race es que las marcas se vinculan a una prueba conocida en todo el mundo por la promoción y la defensa ambiental de los océanos.
"El propósito de la carrera es unir a las personas y aprovechar esta gran plataforma internacional para concienciar en lograr un océano más sostenible", ha asegurado.
Entre las novedades de la próxima edición, la quinta que tendrá en Alicante el puerto de salida, que se ha diseñado la etapa más larga de la historia entre Ciudad del Cabo (Sudáfrica) e Itajaí (Brasil), que durará unos 35 días bordeando tres cuartas partes de la Antártida, así como que habrá dos tipos de embarcaciones, la VO y la clase iMoca.
Los empresarios interesados en apoyar económicamente la salida de esta prueba han sido informados de algunos de los detalles que hacen diferente esta prueba del resto de competiciones mundiales, como que los regatistas se enfrentan a condiciones extremas durante muchos meses como a navegar sin motor a olas de 8 a 10 metros de altura.
También a temperaturas que distan entre los 40 grados centígrados en el Atlántico a menos 20 en los mares del sur, a la privación de sueño porque se suele dormir una media de entre tres y tres horas y media y a una "superación constante" de estrés físico y mental para superar velocidades de crucero en un espacio "muy confinado".
The Ocean Race se basa en el trabajo en equipo dentro de un clima de armonía y este año, también como novedad, se ha estipulado que todas las embarcaciones sean mixtas.
La última edición de The Ocean Race (antes patrocinada por Volvo) contó con una asistencia de 2,5 millones de visitantes en los Race Village de las paradas por las escalas de los cinco continentes y el retorno en el acaso de Alicante y España se cifra en 96,2 millones de euros de PIB (23,7 directo, indirecto 52,1 y inducido 20,4) y 1.696 empleos.
Además, el impacto de marca para Alicante se valora en 28,5 millones de euros.
La zona Race Village pondrá el foco en la innovación, la tecnología y la sostenibilidad con contenidos lúdicos y educativos que incluirán una zona de gaming-videojuegos y nuevos retos digitales, con el fin de llamar a participar a los curiosos.