La neumonía es la responsable del 15 % de las muertes infantiles

¿Qué causa la neumonía en niños pequeños? 

2/09/2021 - 

ALICANTE. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la neumonía es la responsable del 15 % de las muertes infantiles a nivel global, y un 14% de los niños con esta infección requieren ingreso hospitalario.

Los especialistas del Servicio de Pediatría de Quirónsalud Torrevieja nos explican cuáles son los principales síntomas de la neumonía en niños pequeños y cómo se realiza el tratamiento de esta infección respiratoria para prevenir complicaciones y contagios.

¿Por qué se produce esta infección? Causas de la neumonía

La neumonía se define como una infección de los pulmones, concretamente en la parte profunda de dichos órganos. Por este motivo, también se conoce como pulmonía o "infección del tracto respiratorio inferior".

La inflamación puede darse en una parte de los pulmones o en todo el órgano, provocando que los alvéolos pulmonares (que son como bolsitas diminutas llenas de aire en su estado normal) se llenen de líquido y dejen de ejercer su función (hacer el intercambio del aire respirado entre dichos alvéolos y los vasos sanguíneos que los rodean).

El proceso es el siguiente: los virus, bacterias y hongos que pueden causar la infección llegan al pulmón a través del tracto respiratorio superior (nariz o garganta). Al alcanzar los pulmones, desencadenan la respuesta inflamatoria llenando los espacios alveolares de pus, desechos o líquido, e impidiendo el correcto funcionamiento de los pulmones.

En función de la clínica, la exploración física y en su caso, de los resultados de las pruebas complementarias, podemos distinguir entre:

Neumonía típica (generalmente debido a una serie de virus bacterias como streptococcus pneumoniae, haemophilus influenzae, streptococcus pyogenes, staphylococus aureus).

Neumonía atípica (de origen viral o bacteriano, y relacionada con microorganismos como Mycoplasma pneumoniae, Chlamydia pneumoniae o VRS).

Síntomas de la neumonía en niños pequeños

Una de las preguntas habituales en los Servicios de Pediatría de los hospitales es cómo saber si un niño tiene neumonía.

Algunos de los síntomas más habituales de la neumonía en niños son:

  • Fiebre.
  • Escalofríos.
  • Tos.
  • Respiración con sonidos similares a un silbido o quejido.
  • Dificultad para respirar.
  • Dolor de pecho.
  • Dolor abdominal relacionado con el esfuerzo al toser.
  • Vómito.
  • Falta de apetito.
  • Apatía.
  • Malestar general.

Color azulado en los labios (solo en casos de neumonía grave).

De todos ellos, la dificultad para respirar es uno de los signos que puede ponernos alerta. Pero, ¿cómo podemos saber si un niño pequeño o prematuro respira con dificultad?

Además de los sonidos típicos de las bronquitis obstructivas que ya hemos descrito, la dificultad para respirar puede manifestarse de otras formas. Por ejemplo, a través de una respiración abdominal (con el abdomen /con la barriga / con el vientre).

De la misma forma, los niños con neumonía suelen respirar muy rápido, abrir las fosas nasales en exceso, hablar de manera entrecortada y tener las costillas marcadas de forma llamativa en cada respiración.

En cualquier caso, los síntomas de la neumonía son diferentes según la edad del niño y el agente causal:

Las neumonías típicas se caracterizan por un inicio brusco de fiebre, escalofríos, dolor costal, tos  y ausencia de sintomatología extrapulmonar.

Las neumonías atípicas tienen un comienzo insidioso, seguido de fiebre, tos cefalea, malestar general y sintomatología extrapulmonar como diarrea.

El proceso infeccioso, , es parecido al de un resfriado o una gripe complicada. No obstante, la neumonía puede ser difícil de diagnosticar en niños más pequeños, ya que sus síntomas son menos llamativos que en los adultos. Además, en niños de entre 0-3 meses la fiebre asociada a la neumonía es muy poco habitual.

Para evitar complicaciones, los profesionales del Servicio de Pediatría de Quirónsalud Torrevieja recomiendan acudir al pediatraespecialmente en niños pequeños y bebés.

Los síntomas de alarma son:

  • -Fiebre elevada que persiste en 48 horas en el niño mayor, o fiebre mayor de 38ºC en el menor de 3 meses
  • Dificultad respiratoria
  • Mal estado general
  • Vómitos repetidos
  • Decaimiento o irritabilidad marcados que no mejoran con analgésicos habituales

¿Cómo se diagnostica la neumonía en los niños pequeños?

Aunque todos los síntomas anteriores se relacionan con esta enfermedad, el diagnóstico certero de la neumonía es puramente clínico. Por eso, es necesario que sea un pediatra quien, en la consulta, haga una valoración inicial y un examen físico con el fin de determinar la patología que tiene el niño.

Las pruebas que se pueden realizar para diagnosticar la neumonía infantil son poco invasivas y rápidas. Se trata de la radiografía de tórax (para poder apreciar zonas del pulmón en las que no exista aireación) .

¿Cuál es el tratamiento en cada caso?

Según nos indican desde Quirónsalud Torrevieja, el tratamiento para la neumonía infantil consiste en:

  •  inhaladores (broncodilatadores)
  • analgésicos/antipiréticos
  • antibióticos (no siempre)
  • medidas generales: hidratación (oral o intravenosa según el caso), lavados nasales, medidas posicionales (mantener posición semiincorporada)
  • oxigenoterapia en las neumonías que precisan ingreso.

La antibioterapia intravenosa y la oxigenoterapia solo serán necesarias en los casos más graves, y cuando el niño requiera ingreso hospitalario.

La hospitalización se valora cuando:

  • El microorganismo que ha causado la neumonía es poco habitual o presenta resistencia a los antibióticos.
  • El niño sufre un derrame pleural u otras complicaciones infecciosas
  • El niño necesita la administración de oxígeno
  • El niño presenta dificultad respiratoria importante que no mejora con el tratamiento prescrito
  • Cuando hay deshidratación e intolerancia oral

Igualmente, los especialistas en pediatría de Quirónsalud Torrevieja destacan la importancia de controlar, de manera más específica, aquellas neumonías infantiles que aparecen en el hospital, cuando el niño ha sufrido un ingreso por otro motivo de enfermedad.

En cualquier caso, en la mayoría de los niños, el tratamiento ambulatorio es suficiente para curar la neumonía y el ingreso no es necesario.

Las medidas en domicilio habituales son facilitar el descanso del niño y su hidratación, ofreciéndole líquidos.

Si el médico receta antibióticos, deberán administrarse en los horarios pautados y a lo largo del tiempo prescrito. Si el niño tiene fiebre o malestar, el pediatra puede prescribir antitérmicos.

Por otra parte, los fármacos para combatir la tos en estos casos suelen estar contraindicados, ya que el objetivo del tratamiento contra la neumonía es eliminar el moco de los pulmones y dichos medicamentos pueden impedir la correcta expectoración.

Y, por supuesto, ante cualquier duda, problemas con el tratamiento o empeoramiento clínico del niño, la pauta ante una neumonía es acudir inmediatamente a un especialista y realizar siempre un control en 24-48 horas para ver la evolución

Solicita más información en el Servicio de Pediatría de Quirónsalud Torrevieja

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