ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante se abre a estudiar todo tipo de propuestas para trazar el diseño urbanístico del barrio de Sangueta a través de un acuerdo de colaboración con el departamento de Edificación y Urbanismo de la Universidad de Alicante (UA), por el que se captarán las propuestas que puedan aportar los alumnos que cursen los últimos cursos de sus grados y sus postgrados.
Se trata de una iniciativa con la que la Concejalía de Urbanismo que coordina el edil Adrián Santos Pérez trataría de recopilar todo tipo de posibilidades a la hora de definir qué tipo de soluciones y de dotaciones podrían incluirse en el Plan Especial con el que se debe definir su futuro. O, como mínimo, para descartar planteamientos que se considere que no podrían tener encaje en el entorno.
Para ello, se ha previsto concertar un convenio de colaboración, así como la firma de un contrato de prestación de servicios, en el que se establece un primer plazo para presentar alternativas sobre el barrio de Sangueta que se extendería hasta el final del primer cuatrimestre. Además, se incluiría un segundo plazo para que pudiesen formularse aportaciones respecto al desarrollo de otros barrios de la ciudad.
La captación de aportaciones entre el alumnado vendría a complementar el proceso de consulta ciudadana que el departamento municipal anunció en mayo de 2021 como primer paso para dar cumplimiento a la sentencia dictada por un Juzgado de lo Contencioso de Alicante en la que se conminaba al Ayuntamiento a redactar y aprobar ese Plan Especial sobre su diseño urbanístico. Con todo, esa consulta pública aún no se ha llegado a poner en marcha, como se trasladó a una representación de parte de los residentes del barrio en un encuentro informativo celebrado el pasado 24 de octubre.
Lo cierto es que la planificación del futuro del barrio de Sangueta, incluido en la llamada Operación Integrada número 6, no se antoja fácil, ya que confluye la existencia de edificaciones ya consolidadas, además de suelo propiedad de la Autoridad Portuaria, según precisaron fuentes municipales consultadas. De ahí que resulte necesaria una regulación en el que se cuente con su implicación.
Hasta ahora, el equipo de gobierno, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), solo ha planteado la posibilidad de que cualquier intervención en ese ámbito requiera de financiación de administraciones superiores, así como de algún tipo de colaboración público-privada ante la inversión requerida para urbanizar el sector y dotarlo de dotaciones públicas. Entre ellas, se ha barajado la creación de una gran zona verde, además de la hipótesis de incorporar equipamientos deportivos vinculados a la práctica de deportes náuticos.
La última propuesta conocida fue la promovida bajo el mandato del popular Luis Díaz Alperi con la que se preveía la construcción de un centro de congresos como palanca para urbanizar el conjunto del sector. Con todo, la propuesta acabó desestimándose de forma definitiva en 2015, tras la llegada de PSPV y Compromís al Consell, por su alto coste económico y social, al conllevar el realojo de los actuales residentes en edificios de nueva construcción.