ALICANTE. El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante, compuesto por PP y Cs, se anticipa al fin de la declaración del estado de alarma y comienza a planificar cuál será la regulación de la hostelería en la ciudad a partir del 21 de junio. Las concejalías de Comercio y Ocupación de Vía Pública que dirigen Lidia López y Manuel Jiménez (ambos del PP) han concertado un encuentro con representantes de las principales asociaciones del sector -la Asociación Provincial de Empresarios de la Hostelería (APEHA), la Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA) y la Asociación de Locales de Restauración y Ocio (Alroa)- esta misma semana para debatir fundamentalmente sobre las condiciones de funcionamiento de las terrazas a partir de esa fecha, ya que el decreto de Alcaldía de medidas excepcionales acordado en abril está ligado a la duración de ese régimen especial.
En ese decreto se establecía la posibilidad de que los negocios hosteleros pudiesen ampliar la ocupación de superficie en la vía pública para la distribución de veladores con el fin de maximizar sus posibilidades de negocio, toda vez que tanto la Fase 1 como la Fase 2 del proceso de desconfinamiento solo permitía el uso de las terrazas con restricciones de aforo. Además, mediante ese decreto, también se permitía que los locales que no dispusiesen de licencia de velador con carácter previo, pudiesen obtener ese permiso de manera temporal con el fin de facilitar su vuelta a la actividad, puesto que durante la Fase 1 no se permitía el consumo en el interior de los establecimientos.
Comercio y Ocupación de Vía Pública deben resolver en qué situación queda el pago de la tasa de veladores que se suspendió a finales de marzo
Ahora, la limitación de aforos en las terrazas desaparece, después de que la Generalitat regulase, este domingo, con el avance a la Fase 3, que se podría utilizar el 100% de las mesas de las terrazas, siempre que se mantuviese la distancia de separación de dos metros entre ellas. Además, en esa nueva normativa, también se permite el uso del interior de los establecimientos con una ocupación máxima del 75%, salvo para los locales de ocio nocturno, en los que solo se permite una ocupación del 30%.
No obstante, esa es la normativa de aplicación hasta el próximo lunes. De ahí que el bipartito esté sopesando qué posibilidades cabe adoptar más allá de esa fecha. Así, según las fuentes consultadas, se podría barajar la concesión de una prórroga sobre la ampliación de la superficie ocupada por los veladores en el caso de que la Generalitat mantenga esa distancia de dos metros de separación entre mesas en cuanto comience la etapa de la llamada nueva normalidad. De este modo, se evitaría restringir la actividad de parte de los veladores.
En segundo término, los responsables de Comercio y Ocupación de Vía Pública también deberán abordar en qué situación queda el pago de las tasas por la instalación de veladores, que quedó suspendida hasta el fin del estado de alarma, a través de otro decreto firmado a finales del mes de marzo. Además, en ese momento se adoptó el compromiso de retorno de la parte proporcional correspondiente a los tres meses en los que la instalación de terrazas permaneció prohibida. A priori, la posición defendida entre los hosteleros es que el pago de esa tasa se bonifique en cuanto se deba de liquidar la tasa del próximo ejercicio.