ALICANTE. El concurso convocado por el Puerto de Alicante para optar a la concesión del faro del Cabo de las Huertas para prestar un servicio de restauración hostelera, adelantado por Alicante Plaza, es compatible con el estudio de proyectos que aspiren a implantar otro tipo de usos ambientales o culturales, en el caso de que se presenten y den lugar a un segundo proceso de licitación, al margen del ya convocado de manera específica para implantar un servicio de restauración. Esos usos alternativos forman parte, de hecho, de los objetivos encuadrados en el programa nacional de Puertos del Estado, Faros de España, como estrategia dirigida a la conservación responsable, sostenible y respetuosa con el medio ambiente, en la que se pretende "el desarrollo de actividades distintas de la señalización marítima, con usos alternativos, como la hostelería, la investigación o la cultura", según han subrayado este lunes fuentes portuarias.
El programa "Faros de España" persigue una vía de financiación complementaria para el mantenimiento y la conservación de las instalaciones, fundamentalmente en algunas edificaciones, como las viviendas de los antiguos fareros, que en la inmensa mayoría de los casos han quedado sin uso". En esta línea, las mismas fuentes han precisado que, en el caso del faro del Cabo de las Huertas, se ha recibido una solicitud para habilitar un negocio de restauración.
Así, la Autoridad Portuaria de Alicante ha considerado conveniente convocar un concurso público para que cualquier interesado pueda plantear una propuesta alternativa, ya sea destinada a dar un uso hostelero similar o en cualquiera de las otras actividades amparadas por Puertos del Estado. De hecho, según fuentes portuarias, "la Autoridad Portuaria de Alicante muestra públicamente su preferencia porque tal espacio pudiera concesionarse con una finalidad de índole cultural". Es más, las mismas fuentes han incidido en que de los 7 faros existentes bajo su dependencia, el situado en l'Alfàs del Pi está concesionado al ayuntamiento como centro de interpretación en el Parque Natural de Sierra Helada desde hace once años. Además, actualmente, está en trámite la solicitud del Ayuntamiento de Xàbia, para concesionar el faro de San Antonio, como centro de interpretación del Parque Natural del Macizo del Montgó y de la Reserva Marina del Cabo de San Antonio.
Por el momento, según las mismas fuentes, la Autoridad Portuaria no ha recibido muestra de interés alguno en solicitar una concesión para desarrollar algún proyecto de similares características en el faro del Cabo de las Huertas, pero anima a cualquier organización pública o privada a hacerlo en el momento en el que se abra el plazo administrativo para hacerlo (tras el levantamiento de la declaración del Estado de Alarma). En todo caso, sea cual sea el uso previsto, a cualquier licitador se le exigirá "la rehabilitación respetuosa de las edificaciones ya existentes, la imposibilidad de construir cualquier otra edificación, y la presentación de un proyecto respetuoso y de sus correspondientes avales", como figura en las bases del concurso.
Las bases de la convocatoria concretan que no se podrá construir ningún edificio nuevo y que la torre del faro deberá ser restaurada sin que forme parte de la concesión
Así, no se podría construir ningún edificio nuevo, sino que toda propuesta debería centrarse en la rehabilitación de la antigua vivienda del farero, un almacén y un garaje-taller ya existentes; además, se vería obligado a restaurar la torre de la linterna del faro, sin que, en ningún caso, la misma forme parte de la concesión.
La parcela de dominio público portuario en la que se ubica el faro y las edificaciones colindantes, tiene una superficie de 52.000 metros cuadrados. El concurso de la posible concesión solamente contempla otorgarla por una superficie de 1.861,66 metros. El resto de superficie quedaría en idénticas condiciones a las actuales, como también ha informado este diario.
Las bases del concurso no permiten más que la rehabilitación de edificaciones ya existentes, conservando su aspecto original, de modo que "no existe la más mínima posibilidad de deteriorar el entorno, ni de incrementar la superficie o el volumen construido". Los más de 50.000 metros no concesionados, continuarán exactamente en las mismas condiciones que ahora, sin que pueda verse afectada la flora, la fauna o la vida marina.
Por último, el concurso prevé que quien pretenda ser concesionario tendrá que presentar un plan de evaluación de riesgos, que garantice la ausencia de saturación de personas, dado la limitación del aforo de los locales (como en cualquier otro restaurante), no afectando a la sostenibilidad, ni a la intimidad de los moradores de residencias preexistentes que estén relativamente próximas.
Por lo pronto, como ya ha informado este diario, se ha abierto una petición en Change.org dirigida al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para detener el proyecto aceptado por el consejo de la Administración del puerto de Alicante para convertir el Faro del cabo de las Huertas en una instalación hostelera. "El Cabo de las Huertas es un espacio protegido, ¿cómo se puede hacer compatible la explotación de un restaurante con la protección de la zona? ¿Acaso no hemos aprendido nada?", dice Lola Martínez, la creadora de petición en el texto de su campaña, donde explica que la naturaleza del plan de remodelación del faro está dentro de el programa Faros de España que tiene como objetivo "desarrollar actividades alternativas en los faros".
Según la propia creadora, ya hay suficientes ejemplos a lo largo de toda la Costa Brava del impacto negativo que supone para la naturaleza los negocios hosteleros. Además el Faro del Cabo de las Huertas se encuentra en una zona protegida y propensa a actividades como el buceo que podrían verse damnificadas.
Entre las razones de quienes firman la petición está por ejemplo la de Ana Tormos, oceanógrafa quién encuentra "muy triste que una zona tan bien conservada en la actualidad y con grandes praderas de posidonia oceánica se pierda por hacerla turística".
En la propia petición Lola ofrece como alternativa a esta reconversión del Faro del cabo de las Huertas "un centro de investigación para divulgar la biodiversidad de nuestro mar que ayude a que las personas cambiemos y entendamos que debemos respetar la naturaleza que nos rodea".