El PSOE denuncia que varias obras de Alicante "incumplen la regulación sobre accesibilidad"

ALICANTE. El grupo municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Alicante denuncia supuestos incumplimientos respecto a los requisitos de accesibilidad en varias de las obras ejecutadas en el Centro. En concreto, el PSOE ha apuntado, a través de un comunicado, que "ni el alcalde ni el equipo de gobierno del PP ha prestado la más mínima atención a las necesidades de accesibilidad de la ciudad durante el desarrollo de las obras ejecutadas en el centro de Alicante. Tanto es así que el resultado de estas reformas incumple de forma flagrante algunas de las disposiciones de la legislación autonómica, como son la altura de las aceras o la obligada implantación del carril bici en la calzada", según apunta el edil Raúl Ruiz en dicha nota pública.

En concreto, los socialistas señalan que "el art 25 del Decreto 65/2019, de 26 de abril, del Consell, que aborda la regulación de la accesibilidad en la edificación y en los espacios públicos, determina que 'la altura del bordillo de las aceras no deberá superar 0,12 metros salvo en las plataformas de acceso a transporte público, que se ajustará a los requisitos de los medios de transporte. El bordillo no tendrá arista viva'. Y a su vez, el artículo 32 determina que 'los carriles reservados al tránsito de bicicletas se dispondrán en la calzada'. Se trata de dos cuestiones que no se respetan en obras como las del eje Gadea-Marvá, Soto-Ramón y Cajal o Marqués de Molins, a pesar de que estas obligaciones legales vienen explícitamente contempladas en sus Pliegos de Prescripciones Técnicas", explica el comunicado.

Ruiz ha comprobado que las aceras de Marqués de Molins miden entre 13 cm (a la altura de la escuela de idiomas) y 15 cm (al otro extremo de la calle); el carril bici de Gadea y Federico Soto se ha ejecutado sobre el mismo paseo, con un bordillo que supera los 14 cm. La isleta peatonal de Canalejas con Gadea tiene una altura que supera los 19 cm, además de un carril bici habilitado también al paseo de Canalejas, con un bordillo que supera los 15 cm de altura.

"Estas obras, en algunos casos ya ejecutadas y abiertas al público, se han financiado con fondos europeos con el fin de garantizar una movilidad sostenible y digna. Sin embargo, han acabado traicionando ese propósito y han cargado más problemas sobre la movilidad de la zona centro. Todo ello sin mencionar la situación de Luceros, donde pretenden hacer cruzar el carril bici por el centro por no eliminar los polémicos quitamiedos triangulares, que a pesar de su altura de 20 cm se confunden con la acera y causan caídas de peatones todos los días", ha concluido.