Pacheta se deshace en elogios hacia Sory Kaba y Javi Flores

ELCHE. Llegó la ansiada primera victoria en Liga y con ella la tranquilidad. Así lo aseguraba un José Rojo Pacheta que definía el partido de los suyos ante el Lugo como "muy serio, pero no el más brillante".

El técnico burgalés del Elche no escondía su deseo de que "el triunfo nos tranquilice y no nos relaje", al tiempo que "ponga en valor" lo que hace y se muestre ya como "ese equipo peligroso que sabe lo que es ganar". 

"Llevábamos casi dos meses buscando la primera victoria y no llegaba, pero como siempre os digo es algo que tiene fecha de caducidad, nos dará paz", añadía un Pacheta que agradecía haberse sentido "protegido por el club y la afición" en ocho semanas en las que la cosa podía haberse puesto "difícil" para él "en cualquier otro equipo" con las exigencias y masa social como la que tiene el Elche.

"Le doy las gracias a la afición que no ganando nos ha dado cariño y ahora que lo hemos conseguido estarán más contentos", apuntaba el entrenador franjiverde que ya adelantaba que a La Coruña van a ir "a ganar, a jugar de tú a tú aunque no tengamos ya la presión de lograr la primera victoria" porque "no le da miedo ningún equipo" y aseguraba que pese al empate del Lugo estaba seguro de que los suyos iban a ganar ("Como en Gijón", decía), si bien reconocía también que después de tantos remates al ver que el rival marcaba en su primera llegada había pensado que se repetía la historia de partidos anteriores.

El técnico burgalés, que se mostró seguro de que los problemas musculares que obligaron a Iván Sánchez y Borja Martínez a retirarse antes de tiempo no les impedirán estar en disposición de jugar en Riazor, se deshizo en elogios hacia Sory Kaba y Javi Flores: del primero dijo que "todavía tiene más virtudes de las que muestra (...) gol, mucha fuerza, es más hábil con balón que la mayoría, muchos recursos (...) pero hay que forzarle con mesura"y del segundo que "juega en la misma posición que el año pasado pero hace lo que quiere y hay que dejarle (...) Manu le da equilibrio, no la pierde nunca, no se la quitan ni con la mano, conduce siempre, mide los tiempos del partido (...) está feliz y estamos acertando trabajando con él".