Orihuela Cultural (Cs) reclama a Turismo (PP) la cuota de 2021 y la concejalía la deniega por no prestarle servicios

ORIHUELA. La gerencia de la empresa municipal Orihuela Cultural, gestionada por Luis Ruiz, asesor de Ciudadanos, alerta de la dificultad que está teniendo el ente para desarrollar su actividad con normalidad ante la falta de fondos que debería atender otras concejalías. Reclama a la concejalía de Turismo (PP) que abone la transferencia acordada, una cuota que ha sido denegada por no cumplir con lo pactado de dar servicio con personal a las oficinas de Turismo.

Esta empresa municipal es la encargada de la gestión de la programación cultural del Teatro Circo y de los museos de la ciudad. También debería serlo para las oficinas de turismo. Para su funcionamiento se consignó que la concejalía de Cultura aportaría 670.000 euros y la de Turismo 260.000 euros al año, repartido en cuotas trimestrales. En total la empresa gestionaría 930.000 euros.

En octubre se nombró a un nuevo gerente de Orihuela Cultural, asesor de Ciudadanos, tras la renuncia de la funcionaria interina del área de Cultura que desde marzo de 2021 estaba al cargo. Unas semanas después de que fuera elegido, el actual gerente solicitó a través de un escrito a la concejalía de Turismo la transferencia de crédito correspondiente a 2021 con el fin de hacer frente a los salarios, seguros sociales, proveedores y otros gastos de la empresa municipal. El 17 de noviembre, la edil de Turismo le notificó la denegación de dicha transferencia. Argumentó que esa petición era errónea pues “el importe de los servicios de Orihuela Cultural que se reclaman no se han prestado en esta concejalía”.

Calificó de error dicha petición porque tal y como relata la edil, Mariola Rocamora, la última vez que se hizo fue en febrero de 2020 teniendo por ella la misma respuesta. Rocamora explica que en el cuarto trimestre de 2019 ya se estaba incumpliendo el acuerdo al no enviar el personal correspondiente a las oficinas de turismo. Esa transferencia también la denegó dando como respuesta que “el importe no corresponde con los servicios que se presta, ajústese al servicio que se presta actualmente”. No se produjo tal ajuste por lo que la transferencia no se ejecutó hasta que el alcalde dio órdenes para que se procediera. Esa transferencia finalmente se produjo en marzo de 2020. Tras reclamar la transferencia del primer trimestre de ese año y ser denegada no se volvió a solicitar hasta el pasado noviembre, según asegura Rocamora.

El 24 de ese mes, el gerente envió un correo electrónico al alcalde comunicándole que “ante la denegación de dicha transferencia, y no disponer de dinero suficiente en la cuenta bancaria para abonar nóminas de noviembre, gerencia negocia con Caja Rural una póliza de crédito de 150.000 euros” con el fin de efectuar el pago de nóminas de noviembre y diciembre, la paga extra y otros gastos de la sociedad municipal. Se preconcedió el crédito pero no llegó a materializarse porque no se ha hecho oficial el nombramiento de escritura pública al no haberse convocado todavía el Consejo de la Sociedad.

Unas semanas después, el 13 de diciembre, el gerente remite al alcalde el documento de la paga extra para que las firme. En ese momento, también informa el gerente al primer edil, que hay un adeudo en la cuenta de más de 14.000 euros y según el convenio esa extra debe abonarse el 15 de diciembre y las nóminas el día 20. Días más tarde, según relata el gerente, recibe del alcalde las instrucciones para abonar la paga extra. El adeudo de cuenta es más del doble una semana después, 31.792 euros. Dos días más tarde, el 29 de diciembre, se ejecuta la transferencia de crédito pero por importe de 140.000 euros, partida que salió de las concejalías de Sanidad (PP) y Educación (Cs). La firma de las nóminas por parte del alcalde llegó el 31 de diciembre y desde gerencia procedió al momento a proceder a la transferencia de las nóminas. Esta situación ha provocado que las nóminas llegaran al personal con más de diez días de retraso.

El gerente alerta de que esta situación está provocando un agravio a los proveedores, con casos de facturas sin abonar superiores a 25.000 euros. También se ha visto afectada la propia programación cultural del Teatro Circo. Asegura que se han cancelado muchas actuaciones por falta de fondos para el pago del caché de los artistas.

La edil de Turismo insiste en que ella no tiene ningún problema en retomar la transferencia correspondiente pero siempre y cuando se otorgue los servicios de personal para las oficinas de turismo. Ahora se está llevando a cabo con personal extraído de programas del área de Desarrollo Local y a través de los guías oficiales de la Comunidad Valenciana.