ALICANTE. El proceso de negociación para confeccionar la candidatura electoral del PSOE de Alicante continúa a fuego lento, con la mediación de la dirección regional del partido, a la espera de que pueda producirse un próximo encuentro entre representantes de la ejecutiva local y la propia alcaldable, Ana Barceló, para poner en común los resultados de la asamblea de listas celebrada el pasado domingo, con las incorporaciones o la reordenación que pueda plantear Barceló en su condición de cabeza de cartel.
Por lo pronto, en los contactos previos desarrollados en las últimas horas se habría producido cierta relajación de las posiciones de partida que se habrían manifestado desde su entorno hasta el momento. Así, según fuentes consultadas, Barceló habría trasladado su pretensión de poder decidir los primeros cuatro puestos de la futura lista -es decir, desde el puesto dos al sexto, una vez descontada a ella misma como número 1-, en lugar de los seis que habría reivindicado hasta este lunes.
Se trataría, a su vez, de una reducción respecto a la propuesta que se llegó a plantear en un principio, con la pretensión de poder nombrar hasta el candidato que ocuparía el puesto número 9 de la papeleta, en lo que se traduciría en un intento de aproximación de posturas, en el que, al tiempo, se garantizase su capacidad de maniobra para confeccionar al futuro equipo de concejales.
A priori, esa última propuesta habría sido acogida con receptividad por parte de los sectores representados en la ejecutiva local, en la medida en que procuraría cierto equilibrio entre la opinión manifestada por la militancia a través de la consulta de la asamblea de listas y la potestad que pudiese tener Barceló para confeccionar su equipo. Otra cosa es, no obstante, que pueda renegociarse la capacidad de fijar ese orden concreto que se demandaría por parte del entorno de la candidata.
O lo que es lo mismo, que el punto de discusión podría reducirse ahora en que fuese Barceló quien designase, precisamente, los primeros puestos de la lista, en lugar de otras cuatro plazas distintas entre las que se considera de salida, con perspectivas de lograr acta de concejal. En la actualidad, el PSOE dispone de nueve concejales y, según fuentes del partido, se manejan estimaciones que garantizarían un crecimiento a partir de esa cifra hasta llegar a una horquilla de entre diez y doce representantes en la futura corporación.
Eso sí, todo parece indicar que seguiría existiendo todavía un segundo posible motivo de fricción en el supuesto de que se mantuviese el rechazo de la candidata a la incorporación de determinados representantes -se ha hablado del secretario general, Miguel Millana, de la edil Lola Vílchez y de María José Adsuar- con la pretensión de buscar a otros perfiles con experiencia en distintos ámbitos.
No obstante, lo cierto es que el aplazamiento de la reunión de la ejecutiva local en la que se debe aprobar la candidatura a remitir a la comisión de listas regional da margen para que puedan perfilarse las negociaciones en busca de puntos de encuentro definitivos. Por el momento, la misma Barceló sigue midiendo los tiempos sin pronunciarse sobre sus preferencias en la confección de la lista para centrarse en la recopilación de propuestas con el desarrollo de encuentros sectoriales con las que completar su programa electoral.
En esta línea, Barceló mantuvo sendos encuentros por separado con una representación de la directiva de la Federación de la Obra Pública de Alicante (FOPA) y con responsables del lobby empresarial Ineca con el objetivo de escuchar sus reivindicaciones y peticiones sobre temas de ciudad que puedan abordarse desde la gestión municipal.
En paralelo, el mismo secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, terció también este martes en el debate sobre la confección de la candidatura electoral de la ciudad, en una comparecencia pública ofrecida en Almassora (Castellón), en la que avaló la capacidad de decisión de Barceló a la hora de configurar su propio equipo. Puig fue claro al sostener que la alcaldable por Alicante y presidenta del PSPV-PSOE "tiene toda la legitimidad y fortaleza" para abordar esa tarea y que "tendrá que hacer el mejor equipo para ganar en Alicante".
Es más, señaló que la prioridad del partido debería ser "pensar en términos de la sociedad; no pensar en términos hacia dentro, siempre hacia fuera" para no centrarse en cuestiones endogámicas o orgánicas en cuanto a la composición de la lista. "Lo que está en cuestión en este momento es si un proyecto de ciudad vira hacia la derecha, hacia el pasado, o vira hacia el futuro. Nosotros tenemos un compromiso, una conciencia de servicio a la ciudadanía", concluyó.