ALICANTE (EFE). El entrenador del Hércules, Lolo Escobar, afirmó este jueves, en rueda de prensa, que su equipo se maneja mejor en situaciones de movimiento que en la tranquilidad, en alusión a las declaraciones que realizó tras el partido de la pasada jornada en la que criticó el rendimiento de sus jugadores.
“El de hoy ha sido uno de los mejores entrenamientos desde que estoy aquí y me apunto a que mantengamos esta intensidad porque tendremos más opciones de ganar. A ver si el dolor del domingo somos capaces de enfocarlo hacia Lleida”, señaló el preparador extremeño.
“Vamos a ver si hemos logrado remover y activar. Ya lo dije cuando llegó el mercado de invierno, que mover la plantilla nos venía bien. La tranquilidad no me gusta y en el movimiento veo a la gente activada”, añadió el entrenador, quien deseó que su plantilla “me calle la boca de aquí al final de la temporada”.
“Sería perfecto y yo encantado de la vida”, insistió el entrenador, quien confesó estar “cansado” de esperar a que los jugadores se comprometan con el equipo, en alusión a Ander Vitoria.
“No puedo esperar, si se quiere subir, que se suba. Estoy centrado en lo que tenemos y en los activos del club”, apostilló.
Escobar espera en Lleida un partido “igualado” y dijo que el equipo catalán tiene similitudes con el Hércules. “Somos muy parecidos, en cuanto a masa social y estadio. Ellos primero defienden y luego corren. Si les dejas que se ordenen es complicado de atacarles”, explicó.
El entrenador aseguró que para que el Hércules tenga opciones de pelear por la fase de ascenso tiene que “sellar” el déficit de -10 puntos con el que él llegó al banquillo.
“Estamos en +4 y en Lleida podemos mejorar y ponernos en +7. Tenemos que estar por encima de +10 para tener opciones”, insistió el extremeño, quien admitió estar dudando si citar al delantero del filial Salah para el partido.
“Estoy en una disyuntiva porque es un jugador que le da mucho al Hércules B, pero tiene bastantes papeletas de viajar”, comentó el preparador, quien consideró una ventaja para convivir con la presión en el tramo final de la temporada que el equipo esté “jugando finales desde que llegué”.
“Me encantaría ver al equipo sin presión y ya metido en el playoff. Tener una secuencia buena de resultados para estar relajados”, indicó el entrenador, quien consideró una ventaja tener dos partidos seguidos como local, si bien precisó que “hay que llegar con vida a esos partidos y eso pasa por Lleida”.
“Quedan 18 puntos y dentro de tres semanas no sé qué va a pasar”, añadió Escobar, quien afirmó que para él es una ventaja enfrentarse en la recta final del curso a equipos de la parte baja de la tabla.
“Tendremos más opciones, aunque luego todo está igualadísimo. Mejor evitar alguno de los cocos que tenerlos ahora y jugársela ante ellos”, argumentó.