ALICANTE. En los últimas semanas, la Diputación de Alicante ha aprobado los presupuestos de 2023 y ha anunciado los excedentes que destinará en 2023. Con todo lo acontecido, el portavoz del grupo socialista en la institución Toni Francés, analiza las razones de su posicionamiento, reivindica el Fondo de Cooperación Municipal como instrumento que permite a los consistorios recibir dinero y destinarlo a fines indeterminados y critica la "ausencia de liderazgo" que, a su juicio, tiene la Diputación "con un presidente más dedicado a sus objetivos electorales".
-¿Por qué votó en contra el PSPV de los presupuestos de la Diputación de Alicante?
-Son los últimos presupuestos del mandato, y es una legislatura perdida. Mientras otras diputaciones han aprovechado este periodo para modernizarse, y hacer unas instituciones más ágiles, más transparentes, con menos burocracia, y más útiles para los municipios, Alicante continúa con una diputación que no ha tenido ni la capacidad ni la valentía ni la voluntad de aplicar la modernización que hacía falta. La Diputación de Alicante continúa como hace décadas, que trabaja por inercia, sin liderazgo y que son los técnicos los que llevan hacia adelante la gestión. Siguen las mismas subvenciones; los procedimientos…y como consecuencia de todo, es la institución que menos dinero transfiere a los ayuntamientos, cunado es el principal encargo constitucional que tiene la diputación. Insisto, es una legislatura perdida, y este presupuesto ahonda en esta dinámica negativa.
-Posiblemente, la ejecución del plan Planifica sea el ejemplo de lo que usted está describiendo…
-Se lo dije al diputado de Infraestructuras, Javier Gutiérrez, en el último pleno. Acabará el mandato sin haber ejecutado prácticamente ninguna obra del Planifica de la parte que tiene que ejecutar la Diputación de Alicante. Algunos municipios sí que han acabado las obras, pero la diputación no.
-Una de las grandes banderas del PSPV ha sido la puesta en marcha del Fondo de Cooperación Municipal, que el PP y Cs rechazan adherirse y, además, lo ha impugnado ante los tribunales. ¿Qué opina de la estrategia de judicializar la aplicación de una ley? ¿Qué puede pasar en un futuro?
-Estoy convencido de que el TSJ validará una ley como es la del Fondo de Cooperación que apuesta por el municipalismo y beneficia a todos los municipios, y que va en la línea de los objetivos que tiene la diputación. Ahora existe una resolución judicial que lo suspende de manera cautelar, pero no entra en el fondo del asunto. Lo triste es que una ley como ésta, reivindicada por el municipalismo desde hace décadas, sea impugnada por una institución como la diputación. Y lo triste también es que durante estos siete años, en los que la participación el Fondo de Cooperación era voluntaria, y con los criterios que hubiera querido, la Diputación de Alicante ha sido la única institución que no se ha sumado. La única motivación para no sumarse no es porque Mazón piense que no es buena para los municipios, sino que es una estrategia política de oposición al Gobierno de Ximo Puig y son los municipios los que hemos pagado las consecuencias. Mazón ha pensado más en el electoralismo que los intereses de los municipios.
"Estoy convencido de que el TSJ validará una ley como es la del Fondo de Cooperación, que apuesta por el municipalismo y beneficia a todos los municipios"
-¿Considera que hay un punto de inflexión en las estrategias de Mazón desde que es presidente del PPCV y, por tanto, candidato a la Generalitat?
-Mazón siempre ha pensado que la presidencia de la Diputación de Alicante era su trampolín hacia Valencia, al PP y a la Presidencia de la Generalitat. Y desde el principio, siempre lo planteó así. Está claro que desde que asume la presidencia del PPCV, pone toda la maquinaria de la institución al servicio de esta causa. El PP lo suele hacer: ocupan las instituciones porque cree que son suyas. Esta situación no deja de ser un menosprecio a la institución, a los ciudadanos, a la provincia…
-Usted mismo ha criticado reiteradamente que Mazón está ausente en el día a día de la Diputación de Alicante…
-Todos somos conscientes de ello. Y de eso se está resintiendo la institución. No hay un liderazgo. Está ausente el presidente y el gobierno. Y repito: gracias a los técnicos de la diputación, la máquina funciona. Mazón sólo está en la provincia cuando tiene un acto electoral y está como presidente de la Diputación de Alicante porque eso le da notoriedad. Pero en el día a día y los problemas de los municipios, no está. Y ahí están los niveles de ejecución presupuestaria, y los problemas que genera la ausencia de liderazgo.
-Antes has mencionado los bajos niveles de ejecución de la institución. ¿Dispone de alguna cifra que avale esto?
-Estamos en los peores índices de ejecución desde que existen registros en la Diputación de Alicante. Nunca habían sido tan bajos. Las últimas cifras de las que disponemos son del tercer trimestre de este 2022 y todavía son peores. Indican que la ejecución es del 32%. Es como una bola de nieve: se hacen anuncios, pero después no se ejecutan. El remanente -excedentes- del presupuesto es un ejemplo: hemos pasado de tener un excedente de 70 millones a los 300 millones, lo cual indica que cada año se gasta y se ejecuta menos.
-Si la Diputación puede destinar esa cantidad, es que no ha cumplido con sus obligaciones y no ha ejecutado el presupuesto. Es decir, que cada año le sobra más de dinero del que tiene el presupuesto. Tampoco esos 160 millones se van a ejecutar en 2023 como viene pasando en los últimos años. Sin embargo, esa mala gestión sí que le permite esos anuncios, tan elocuentes, vacíos de contenido, promesas que finalmente no se acaban cumpliendo.
-De todas las políticas que ha puesto en marcha la diputación son aquellas en las que se transfieren los fondos a los ayuntamientos, tipo bono-consumo o las ayudas a autónomos…
-Si, es posible. Esas medidas han contado con el apoyo del grupo socialista. Todo lo que sea dotar de más herramientas a los ayuntamientos, siempre os hemos apoyado. Son las únicas medidas que han funcionado bien porque son van destinada a gasto corriente. Pero faltaría completarlas con recursos a los municipios en los que la Diputación no diga a que se deben destinar. Sino que cada libremente cada consistorio lo destine a aquello que necesita su población.
"Aquí, desgraciadamente, la dinámica es que cada mes hay menos gestión y menos presencia del presidente de la Diputación y del gobierno"
-Una vez aprobado este presupuesto, confía en que habrá gestión de aquí a las elecciones…
-Aquí, desgraciadamente, la dinámica es que cada mes hay menos gestión y menos presencia del presidente de la Diputación y el resto del equipo de gobierno. Creo que el último acto que va a realizarse es el de la aprobación de los presupuestos. Si hasta ahora, Mazón estaba desaparecido, en enero comienza el periodo preelectoral y lo estará más. Lo veremos poco por la Diputación de Alicante y habrá una nula gestión. El PSPV estará hasta mayo reivindicando que la institución responda a los retos que tiene esta provincia y no podemos dar por perdido este mandato. Estaremos trabajando y exigiendo que la diputación trabaje y se impulsen los proyectos. Mazón, de haber sido honesto con la institución y leal con la provincia, tendría que haber renunciado para dedicarse a su objetivo, legítimo también, de ser presidente de la Generalitat. Pero mientras está aquí en la Diputación, es un tapón al funcionamiento de la institución.
"Los diputados de Cs son dos diputados entregados al PP. Están más cerca del PP que de Cs"
-¿Cómo definirías la aportación y trabajo de los dos diputados de Ciudadanos en el seno del equipo de gobierno?
-Más que diputados de Ciudadanos, son diputados de Mazón. Duraron tres meses como diputados de Cs, en los que si se veía algún interés en condicionar o marcar un perfil propio, pero rápidamente se han diluido. Es imposible diferencia hoy en día a un diputado del PP de Javier Gutiérrez o de Julia Parra. Son dos diputados entregados al PP. Están más cerca del PP que de Cs.
