Fotos: AMPERTEC ENERGYELDA. Generación Consciente, la nueva firma de autoconsumo fotovoltaico de la empresa Ampertec Energy, de Elda, ha donado a la asociación Asprodis una instalación solar de 28,5 kW. Según revela el impulsor de la iniciativa, Daniel Pérez, la infraestructura tiene un coste estimado de 30.000 euros y va a permitir al colectivo lograr un ahorro energético de entre 5.000 y 6.000 euros gracias a la energía autoconsumida y a los posibles excedentes que se venderán a la red eléctrica. De este modo, el centro podrá destinar más recursos propios a su labor principal: la sociosanitaria.
Como usuario y socio de Asprodis, Pérez es conocedor de las listas de espera existentes para acceder al Servicio de Atención Temprana; también de que retrasar el acceso a estos tratamientos puede ralentizar la evolución de los niños y las niñas que los necesitan. Ante esta situación, recrimina que la solución de la Conselleria haya sido “aumentar la ratio de los centros sin dotarlos de recursos adicionales”. En Asprodis, concreta, han pasado de atenderse 70 niños a unos 120, “lo que se traduce en la merma del servicio prestado: eliminación de terapias infantiles, creación de grupos de trabajo más grandes o altas antes de tiempo”. Consciente de la problemática, Pérez pensó que, desde Ampertec, empresa de la que es socio y cofundador, podrían contribuir a que la asociación destinase sus recursos a la contratación de más personal.
Los cuatro socios de Ampertec Energy. Imagen de archivo.Entonces, relata, se llevó a cabo un estudio de las necesidades energéticas de la entidad y se constató que, de sus cuatro puntos de suministro, dos registraban un consumo elevado. Eran los asociados a la residencia y al centro ocupacional. Se consideró, por tanto, que para conseguir un ahorro en costes significativo, se necesitaba una instalación más grande de lo que Ampertec podía permitirse. “Aprovechamos entonces para hacer partícipes del proyecto a nuestros principales proveedores”, declara Daniel Pérez. Estos fueron Bet Solar (un distribuidor de material fotovoltaico), Risen Energy Spain (un fabricante de paneles solares con sede en El Campello) y Soportes Solares (una industria de fabricación de estructuras de la Vega Baja). Entre todos, reunieron la cantidad suficiente y ahora las placas solares ya lucen en la cubierta del centro.
En cualquier caso, la voluntad de Ampertec es seguir ayudando a otras causas. “Tenemos la intención de destinar todos los años una parte de los beneficios a proyectos sociales y medioambientales, como acciones de reforestación, pero el de 2021 está por decidir todavía”, apunta el empresario. No obstante, asegura que, en el ámbito municipal, no han recibido noticias del Ayuntamiento de Elda para trabajar conjuntamente en las dos comunidades energéticas que, unos días atrás, anunciaron estar desarrollando para los polígonos industriales y el municipio en general. Pese a ello, Pérez afirma que estarían dispuestos a colaborar: “Nos parece realmente interesante y podría ser muy positivo para la ciudad. Si nos llaman y quieren hacernos partícipes, estaremos encantados”.
En el ámbito privado, sin embargo, Generación Consciente tiene proyectadas varias plantas fotovoltaicas, todas ellas en la Comunitat Valenciana. Es aquí —y, especialmente, en la provincia de Alicante— donde, según Pérez, quieren desarrollar la mayor parte de su negocio. De las que están en fase de tramitación, una de las más avanzadas —y también la más relevante— es la de 25 MW que pretenden instalar en Elda. Saben, en todo caso, que la actual avalancha de proyectos fotovoltaicos está saturando a la administración, pero, aun así, esperan disponer de los permisos para iniciar la construcción a finales de este 2021.
En octubre de 2020, los socios de Ampertec confesaron a Alicante Plaza que esperaban cerrar el año con una facturación de 2 millones de euros. Acabado el ejercicio, Daniel Pérez reconoce que no han alcanzado esa cifra, aunque asegura que han estado cerca. “Por suerte”, su sector no se ha visto muy golpeado por la pandemia. “Hemos notado una recesión en el ámbito industrial, pero en el doméstico, la inversión se ha multiplicado exponencialmente con respecto a 2019”, admite.
Una instalación fotovoltaica para el hogar —explica Pérez— “tiene un periodo de amortización de entre 5 y 8 años, dependiendo del perfil de consumo del cliente, porque cada diseño es a la carta”. En la industria, distingue, esta infraestructura se amortiza en un plazo de 4 a 6 años, lo que, considerando que las placas solares tienen una vida útil de unos 35-40 años, la convierten en “una inversión interesante”. De ahí que el autoconsumo esté adquiriendo especial relevancia dentro de Ampertec Energy (en conjunto, una empresa de ingeniería multidisciplinar) y que su equipo haya decidido crear una marca específica para este servicio: la ya mencionada Generación Consciente.
