ALICANTE. Guido Carrillo está de vuelta.
El delantero argentino del Elche volvía este jueves a ejercitarse con normalidad junto a sus compañeros, después de haber dejado atrás una lesión muscular que se produjo en la jornada 31, en el transcurso del encuentro ante la Real Sociedad.
Con el alta médica bajo el brazo, Carrillo se reintegraba a la dinámica de trabajo del grupo, que este miércoles se ejercitaba en el Díez Iborra. Lo normal es que el atacante consiga también el alta competitiva, que termine entrando en la convocatoria para la cita ante el Osasuna del domingo.
Sería otra magnífica noticia para Francisco Rodríguez, toda vez que en los choques contra Mallorca y Betis solo ha podido disponer de dos de sus cuatro delanteros, de Pere Milla y Ezequiel Ponce, al ser también baja por una lesión muscular Lucas Boyé. Este sigue avanzando en su recuperación y todo apunta a que la próxima semana regresará a los entrenamientos grupales, cumpliendo así los plazos que se barajaban cuando se lesionó en el Nuevo San Mamés a principios de mes.