ELDA. Elda ha comenzado a cambiar la escena urbana de su centro histórico. Lo ha hecho con trampantojo (es una técnica pictórica que intenta engañar la vista jugando con el entorno arquitectónico real o simulado, la perspectiva, el sombreado y otros efectos ópticos y de fingimiento , consiguiendo una realidad intensificada o sustitución de la realidad), que se ha realizado en la esquina de la plaza de la Constitución con la calle de La Purísima, una intervención que ha permitido “recuperar las medianeras que estaban en mal estado, así como recrear lo que fueron establecimientos y edificios emblemáticos de mitad del siglo pasado”, según ha expuesto el alcalde, Rubén Alfaro.
Esta primera intervención tendrá “continuidad” en otros rincones del municipio con objetivo de recuperar espacios y mejorarlos”, según la edil de Urbanismo, Pilar Calpena.
Este trabajo ha sido desarrollado por el equipo del arquitecto eldense José Felipe Tomás, que investigó en fotografías antiguas y documentación aportada por el grupo de defensa del patrimonio Mosaico y por el arqueólogo municipal Juan Carlos Márquez, mientras que el pintor Miguel Gracia, conocido artísticamente por Zeta, ha sido quien lo ha llevado a la práctica utilizando más de doscientos botes de espray y 50 kilos de pintura.
La presentación del primer mural ha logrado convertirse en un espacio de atracción por los vecinos, pues son muchos los que estos días se paran ante las pinturas para hacerse una foto con esta imagen, que evoca la Elda de los años 50 del pasado siglo.
“Estamos poniendo de manifiesto además que el grafiti no tiene porqué ser un arte que sea solamente dejar una firma o ensuciar paredes, sino que puede servir para embellecer la ciudad como aquí ocurre”, ha indicado el arquitecto.
En total, el equipo que ha llevado a cabo este trabajo ha empleado más de meses de trabajo, primero en la reparación y enlucido de los muros de las medianeras y después en su ejecución para conseguir el resultado final.