ALICANTE. Un fuerte dolor abdominal... causado por la menstruación. Un accidente por un barranco... de un perro. Una taquicardia... provocada por los nervios. Son algunas de las extrañas urgencias para las que el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (Cicu) ha movilizado unidades Samu de Alicante en los últimos tiempos. 'Urgencias' que en realidad no correspondía atender a estas unidades especiales, o que ni siquiera precisaban de atención médica, y que han consumido valiosos recursos por la ausencia de un correcto filtrado.
Así lo lamentan algunos de los trabajadores del servicio de la provincia de Alicante, que temen que con la inminente centralización (el 11 de enero, en teoría) del servicio en València y el cierre de los Cicu provinciales de Alicante y Castellón esa evidente ausencia de triaje telefónico se acentúe todavía más. "El personal ya no puede más, es una falta de respeto a la población y al personal Samu que debe salir a toda velocidad a tales 'urgencias', y mientras si ocurre una urgencia vital, el Samu está ocupado..."
Así, un Samu tuvo que desplazarse al domicilio de una mujer de 21 años que se quejaba de un fuerte dolor abdominal causado por la menstruación. Algo que, por fuerte que pudiera ser dicho dolor, no suele motivar ni mucho menos el desplazamiento de un Samu. "Jamás hemos hecho nada parecido, sobre todo porque la muchacha del dolor menstrual solo necesitaba que un médico le pautara un analgésico, y se quedó en el domicilio", relatan. En cuanto al operador que consideró necesario enviar un Samu para atender a una perra despeñada, "sin comentarios".
Otras urgencias que han llegado a las pantallas de los Samu, como ha podido comprobar este diario, son una taquicardia sinusal, que es un aumento de la frecuencia cardíaca debido a un ejercicio intenso o a una situación de nervios (y que, si no está relacionada con una patología principal que la cause, ni tiene ni requiere tratamiento médico), una caída en la cocina que no restó movilidad al paciente, aunque se "ha hecho mucho daño", según el aviso, o un atragantamiento de un niño de ocho años "con el aire".
"Seguimos como pollo sin cabeza", señalan desde el personal del servicio. Estos avisos Samu son filtrados y clasificados por el 112, que son los que recogen la llamada, y la envían a cada Cicu provincial. Dentro de 15 días, todo este trabajo se hará desde el Cicu Centralizado en Valencia. Con la particularidad de que, como alertan los trabajadores, "en el 112 de l'Eliana no hay personal médico que pueda orientar la llamada y clasificarla por gravedad, de forma que se envíe el recurso correspondiente y adecuado". Un escenario que, temen, acentúe aún más la remisión de estas urgencias no urgentes.
En principio, si todo sigue según lo previsto, el cierre del Cicu de Alicante, adelantado por Alicante Plaza en 2021, se llevará a cabo el próximo 11 de enero. En este sentido, las cuatro personas con plaza fija que formaban parte del servicio ya han sido reubicadas en otros departamentos del área de Salud de Alicante, mientras que los contratados de refuerzo finalizarán su contrato con el cierre. En cuanto a los interinos, la figura más numerosa, se han visto obligados a aceptar su traslado a València para no perder la plaza, de forma que la mayoría ha dedicado las últimas semanas a buscar pisos de alquiler en la zona.
La Conselleria de Sanidad considera que esta centralización del Servicio de Emergencias Sanitarias (SES) y del Cicu en un único centro permitirá que el servicio sea más eficiente, pero los sindicatos advierten de que el efecto logrado será justo el contrario, al tomarse desde València decisiones que deberían adoptarse sobre el terreno por coordinadores que conozcan no solo la zona, sino que controlen en todo momento la asignación de recursos para evitar situaciones como las anteriormente relatadas.