Laura Vicente, Maite Antón, Antonio Garrigues Walker, Cayetano Sánchez Butrón e Ismael NavarroALICANTE. Antonio Garrigues Walker se ha convertido en nuevo académico de Honor de la escuela de negocios alicantina Fundesem Business School, en un acto de homenaje que se celebró en torno al debate de la internacionalización de las empresas familiares, y que contó con el apoyo de la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (Aefa).
Durante el evento, las instalaciones de Fundesem acogieron el programa Gestión Eficaz del Patrimonio Familiar: Family Office. Una jornada que se realizó junto a Aefa y que contó con las intervenciones de Cayetano Sánchez Butrón, presidente de Fundesem; Maite Antón, presidenta de Aefa y el propio Antonio Garrigues Walker, presidente Honorario de Garrigues; que fue nombrado académico de Honor en Fundesem.
El acto discurrió con un coloquio centrado en la internacionalización de las empresas familiares, en el que se destacó que la idea 'familiar' aplicada a la empresa es "reductiva", y que las experiencias internacionales son necesarias, ya que crean unas oportunidades y riquezas distintas.
Cayetano Sánchez Butrón, encargado de dar la bienvenida y abrir el acto, resaltó que "Fundesem está en un momento de cambio, y la estabilidad económica es la prioridad". A continuación, la presidenta de Aefa, Maite Antón, dio paso a Antonio Garrigues Walker confesando "la admiración basada en el conocimiento, en la capacidad de trabajo que has demostrado y tu gran talante. Antonio Garrigues representa un liderazgo honesto y ético".
Durante la intervención, Garrigues Walker defendió que "una escuela de negocios es una fuente de riqueza", y centró su discurso en la importancia de la internacionalización de las empresas familiares. "El nivel de empresas familiares en España es muy alto, limitar la internacionalización de estas se puede definir como una empresa mal pensada; porque si no vivimos las experiencias internacionales, no estamos viviendo la globalización", aseguró el homenajeado.
El evento finalizó con el nombramiento de Antonio Garrigues Walker como académico de Honor Fundesem, y con un acto simbólico: dejar sus huellas marcadas en cemento, como recuerdo de su aportación al contenido de la escuela de negocios.
