Roberto Rubio (Aldea Energy), Antonio Bernabéu (alcalde de Castalla) y Óscar Reche (Bodega Cooperativa)ALICANTE. La startup valenciana Aldea Energy, que se ha marcado como objetivo democratizar el acceso a la energía renovable, instalará en la Bodega Cooperativa de Castalla una de las mayores comunidades solares de la provincia de Alicante con una superficie de unos 1.000 metros cuadrados y unos 240 paneles solares que supondrán una potencia total de 130 kWp.
Aunque la cubierta de la nave es de más de 3.200 metros cuadrados, se ha apostado por la eficiencia y solo se instalará paneles en las superficies que tengan orientación sur. El proyecto generará más de 190.000 kWh al año de los cuales un 50% irá a parar a cubrir los consumos de la Bodega y el resto de energía podrá ser disfrutada por los cooperativistas. Este excedente se comercializará a través del plan de suscripción ideado por la comercializadora de Aldea Energy para ofrecer a los vecinos de Castalla energía limpia sin necesidad de invertir en una instalación solar en sus viviendas. Según los cálculos de Aldea Energy, esta comunidad solar beneficiará a más de 50 viviendas que se sitúen en un radio de 2 kilómetros y generará un ahorro total de unos 50.000 euros al año.
Esta instalación nace de la iniciativa de la Cooperativa de Castalla y del Ayuntamiento para satisfacer la necesidad de energía limpia del municipio. De esta manera, la superficie de la Bodega ha sido arrendada a Aldea Energy que instalará sin coste alguno para dicha sociedad las placas solares con el objetivo de abastecer de energía limpia a esta instalación, entre los que se beneficiarán los 1.200 socios, y unas 50 viviendas extra para que puedan ahorrar en su factura de la luz a través de una suscripción mensual.
Esta será la primera comunidad solar en el municipio. El ayuntamiento puso en funcionamiento el año pasado una planta solar situada en el tejado del auditorio municipal cuyo objetivo era reducir el consumo eléctrico y las emisiones por parte del consistorio. Una de las ventajas que ofrece este tipo de instalaciones en la cubierta de grandes edificios es el aprovechamiento de las infraestructuras creadas y evitar los grandes parques fotovoltaicos que ocupan una gran superficie de hectáreas.
Dentro del plan de expansión de Aldea Energy, que tiene como objetivo poner en funcionamiento 100 comunidades solares en España, Alicante juega un papel relevante en su estrategia. Según las previsiones de la compañía, en dos años estarán presentes en más del 10% de los municipios alicantinos y proporcionarán un ahorro medio de 1.200 euros anuales en la factura de la luz por instalación a comercios y particulares.
Los acuerdos que firme Aldea Energy serán similares a los de Castalla, ejercer los derechos de explotación de las cubiertas y tejados durante los próximos 30 años. En dicho contrato, los dueños de las cubiertas reciben la energía generada sin coste, fomentando así un modelo colaborativo en el que todas las partes implicadas se benefician.
