ALICANTE. La reparación de las filtraciones y la reposición del suelo del pabellón Pitiu Rochel tendrá que esperar una segunda oportunidad. El concurso convocado por el Ayuntamiento de Alicante para acometer la rehabilitación del edificio ha quedado desierto, al no registrarse ninguna propuesta interesada en ejecutar las obras, según se ha puesto de manifiesto este miércoles en la Mesa de Contratación.
El proyecto, con un plazo de ejecución de 8 meses, partía con un precio de licitación de 1.041.00 euros (impuestos incluidos) como obra a sufragar con cargo al remanente del presupuesto de 2018 (inversión financieramente sostenible correspondiente a 2019). Sin embargo, el importe o las características de la actuación no han resultado lo suficientemente atractivas para ninguna empresa que pudiese estar interesada en su desarrollo.
El problema es que el concurso no puede volver a convocarse y la reparación queda aplazada sine die, ya que los fondos consignados para ejecutarla quedan literalmente bloqueados, como remanente de tesorería. Para que se produzca una nueva licitación, el proyecto debería quedar reflejado en la planificación presupuestaria de 2020, todavía pendiente de aprobación.
No obstante, fuentes del bipartito compuesto por PP y Cs han confirmado este miércoles que la obra de pabellón no figura entre las inversiones previstas, puesto que no se auguraba el posible escenario de que la licitación en curso hasta este momento pudiese quedar desierta. Así, según las mismas fuentes, la rehabilitación queda supeditada a una doble posibilidad: que se modifique el presupuesto ordinario de este año (en el caso de que se apruebe) o que se incluya como inversión financieramente sostenible de 2020, a ejecutar con el remanente presupuestario de 2019.
Sea como fuere, la edil socialista, Llanos Cano, ha solicitado que "se recoja una partida en los presupuestos de 2020, que todavía no conocemos, para poder acometer las obras". En esta línea, ha incidido en que los plazos de licitación y de ejecución del proyecto conllevan que "como muy pronto, las obras se demoren hasta 2021".
Por su parte, el portavoz de Unides Podem, Xavi López, ha lamentado que "la precariedad de los contratos ofrecidos por el Ayuntamiento es tal que ha provocado que las diferentes empresas que podrían haber optado al proyecto, especialmente las pymes de la ciudad, no lo hayan encontrado atractivo".
Además del problema existente con el bajo precio del contrato, López ha considerado que "el retraso en la aprobación del presupuesto por culpa de los líos internos de PP y Cs pueden provocar que las obras no se acometan hasta el próximo año", pese a que, a su juicio, "se trata de una rehabilitación imprescindible". Así, ha lamentado que el dinero que iba a ser destinado al Pitiu "no podrá recuperarse para el mismo proyecto" al estar incluido en las inversiones financieramente sostenibles.
