VALLADOLID (EP). Renault ha anunciado a los sindicatos su intención de suprimir un turno en cada una de sus factorías en España, ubicadas en Valladolid, Palencia y Sevilla, y ha convocado a los representantes de los trabajadores a una reunión del Comité Intercentros el próximo 18 de septiembre.
La empresa del rombo ha hecho esta comunicación a los sindicatos precisamente cuando esta semana ha presentado en Frankfurt el nuevo modelo de Captur, que se fabricará en Valladolid, según la información publicada por El Mundo-Diario de Valladolid recogida por Europa Press.
En concreto, según la información que ha transmitido la empresa a los sindicatos, la cual se concretará en el Comité Intercentros, la previsión es eliminar el 14 de octubre un turno de montaje del motor de gasolina MM14 en Valladolid; el 2 de noviembre otro en la línea de montaje 'J' de Sevilla; y, finalmente, el 2 de diciembre, medio turno de noche en la fábrica de Palencia que afecta a las líneas concatenadas de la factoría de Valladolid.
En estos tres turnos trabajan "aproximadamente" 650 empleados, unos 500 en Palencia y alrededor de 70 en cada una de los dos turnos de Valladolid y Sevilla que podrían suprimirse, según han informado a Europa Press fuentes sindicales.
Las razones dadas por la multinacional del rombo es la bajada de la actividad, aunque los detalles se conocerán en el Comité Intercentros del día 18, cuando también se ha convocado Comité de Empresa en Valladolid, mientras que el de Sevilla será previsiblemente el día 23 de septiembre.
"Malas noticias" y "circo"
Tras conocer la información proporcionada por la empresa, la responsable de la secretaria general de la sección sindical de UGT en Renault, Laura del Ser, ha "lamentado" las malas noticias porque tendrán impacto para el empleo, aunque aún esté sin cuantificar su alcance, y tendrá un impacto tanto en los trabajadores de la empresa del rombo como en los de las empresas auxiliares.
Sin embargo, ha apuntado que habrá que esperar a los órganos correspondientes para recabar los datos concretos de las medidas que propone la empresa y aclarar las "dudas".
Por su parte, la coordinadora general de Trabajadores Unidos, Miryam Largo, cree que lo que plantea la empresa son "movimientos típicos" y "política del miedo" que suelen producirse antes de la negociación del próximo plan industrial, que se deberá iniciar el próximo año.
En este sentido, ha asegurado que es una "cocina" que se programa para que la gente tenga "miedo", un "circo" y unos "malabares" en el que los trabajadores son los "payasos y las marionetas" que finalmente resultan perjudicados y ha incidido en los "millones" que recibe Renault a condición de crear empleo estable sin cumplir este fin.