ELCHE. El Plan de Uso del Riego del Palmeral tendrá que esperar. Si bien el proyecto ya nacía con una licitación que dejaba poco margen de maniobra, porque el 31 de julio debía estar hecho para que el Ministerio de Cultura lo financiase, el plazo de redacción era de siete meses y el concurso empezó casi en febrero, ahora ya es definitivo. El pliego de condiciones exigía unas colegiaciones a los profesionales que no suelen ser habituales, por lo que la única firma que se había presentado ha desistido del proyecto.
A este respecto, se requería un equipo multidisciplinar para redactar dicho plan, con arquitectos, delineantes, abogados urbanistas o historiadores, entre otros profesionales. Aunque se presentó una firma, que fue la única (ARN Arquitectos), las condiciones de la memoria técnica pedían que los delineantes también estuvieran colegiados. En el caso de la persona que ocupaba este puesto no lo estaba, algo que según se señala desde el sector no es lo habitual, por lo que la firma, que había ofertado el servicio por 40.000 euros, no ha podido entregar dicha documentación.
Para esta situación, la Mesa de Contratación establecía que en el caso de que no se subsanase la documentación aportada respecto a los medios humanos ofertados, continuaría el procedimiento con la variación en la puntuación obtenida en dicho apartado. Y en el caso de que no se presentase la documentación requerida, se entendería que se retiraba la oferta quedando desierto el expediente. Y es justo lo que ha pasado. Dado que esta profesional no estaba colegiada, el Ayuntamiento tendrá que declarar desierta la licitación.
Asimismo, los plazos ya suponían una contrarreloj importante, porque los sobres con las ofertas y propuestas técnica y económica se abrieron durante febrero, marzo y abril, siendo el plazo máximo para la entrega del proyecto de siete meses y el límite del Ministerio de Cultura para financiar esta actuación Unesco el 31 de julio. Con todo, desde la concejalía de Parques y Jardines señalan que el contrato se volverá a licitar, aunque eso sí, se tendrá que financiar con fondos propios, u otros ajenos, pero no los estatales para los bienes Unesco.
Hasta que salga, de momento este plan que busca su conservación, al tiempo que advertía de su "peligro de destrucción", queda en punto muerto. Más concretamente, el objetivo es la identificación, tanto física como funcional de cada una de sus partes y componentes, así como definir y coordinar un sistema de acciones que contribuyan al mantenimiento, mejora y divulgación del valor universal excepcional y de las condiciones de integridad y autenticidad en las que está basada la inscripción del Palmeral en la Unesco y su sistema de regadío tradicional.
No es asimismo el único aspecto del palmeral que está a la espera de avanzar, habida cuenta de que después de la aprobación de la Ley del Palmeral, ni se ha entregado aún (que conste) el Plan Especial de Protección, que debe aterrizar la legislación al día a día, ni se ha puesto en marcha el nuevo Patronato con sus nuevos integrantes. Ni los nombrados por el municipio ni por la conselleria. A pesar de que los plazos hace meses que ya se han superado.