Pedro Beneyto en el Foro AP: "La gestión de los ERTE". Fotos: RAFA MOLINA ALICANTE. El momento en el que se han tramitado y ejecutado los Expedientes de Regulación de Temporal de Empleo (ERTE) durante el Estado de Alarma, y la incertidumbre que conlleva el regreso y los primeros en la "nueva normalidad", provoca dudas entre empresas, empleados y quienes hacen de intermediarios y gestionan dichos expedientes. Alicante Plaza organizó esta semana el Foro AP: "La Gestión de los ERTE". Una jornada en la que el director del SEPE en la Comunitat Valenciana, Pedro Beneyto, se sentó junto a representantes de consultoras, colegio de Graduados Sociales, y de despachos de abogados para exponer cómo se han gestionado y tramitado los ERTE desde la administración. También para escuchar y debatir, de mano de los participantes, los problemas en las tramitaciones, hasta cuándo se pueden alargarse, alternativas a los ERTE y el futuro de las empresas tras estos expedientes.
Precisamente, en el evento que estuvo moderado por el director de Alicante Plaza, Miquel González, y que tuvo lugar en el Business World Alicante, Beneyto explicó en la ponencia inicial que "habrá que prorrogar los ERTE hasta final de año" y ahondó en la figura de los ETOP y la transición o pasarela que debe darse entre los ERTE por fuerza mayor, los que se daban en el Estado de Alarma y estos otros Expedientes de Regulación de Empleo por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción.
Para el representante del Sepe en la Comunitat, el RD 24/2020 traza una pasarela de los ERTE a las ETOP, a expendientes de regulación por causas técnicas. "Los ERTE por causa mayor se prolongan en una primera primera fase y habrá que ampliarlos en una segunda ronda hasta el 30 de septiembre; un elemento de transición y pasarela de los ERTE tradicionales. Añade, así, que habrá que fijar, en cada caso, reglas para los rescates de trabajadores en ERTE, incentivando para que las empresas reasuman la totalidad de la plantilla o parte de ella, con reducciones de jornada u otros modos de lograr la reinserción laboral.
"Hay que tener confianza en la reactivación económica y en que no haya rebrotes, porque si no, la recuperación sería mucho más dramática. Se debe imponer el diálogo y el consenso político para un pacto de reconstrucción. A todos nos interesa que salga bien".
Así, Beneyto hizo hincapié en su intervención, en tres ámbitos a la hora de analizar la gestión de los ERTE: el impacto sobre las empresas, sobre el empleo y sobre la sociedad. Y es que, según aportó el director del SEPE en la Comunitat Valenciana, "las medidas en la crisis sanitaria era el combate del virus y la pandemia en primer lugar y, después, más acciones supeditadas a este objetivo". Y apunta a los "efectos traumáticos sobre la producción y el empleo" según indicadores socioeconómicos. De hecho, el Banco de España augura una caída del PIB a finales de 2020 de entre un 9 y un 15%, la mayor bajada en un siglo: y un aumento de la tasa del paro hasta alcanzar el 16 o hasta el 21%. Los índices de pobreza, según datos de Oxfam, podrían llegar al 27%.
En el ámbito de las empresas, según Beneyto, "el impacto es igual o más duro en el empleo y los ERTE han alcanzado a 3,7 millones de trabajadores asalariados y a 1,4 millones de autónomos en cese de actividad". Asimismo, la destrucción de empleo rozó en dos semanas, entre marzo y abril, un millón de puestos de trabajo. Los efectos de estos datos están repartidos de manera desigual, tanto territorial como sectorialmente. Y es que, el comercio y la hostelería se han llevado el mayor impacto. "Según datos de consultoras, a finales de mayo y principios de junio el empleo en hostelería había caído un 85% y un 35% en el comercio a nivel nacional, pero las cifras en la Comunitat Valenciana son mayores".
Y es que el 37% de empleo en la Comunitat se apoya en estos dos sectores. No obstante, señala, el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) ya está manos a la obra en la hoja de reconstrucción en la comunidad autónoma. Además, para Beneyto, el mayor impacto de la crisis socioeconómica en la Comunitat está vinculada a un mayor volumen de empleo precario y temporal, un 28%, mientras que la media nacional está en un 23%.
Según datos desde el Sepe, la provincia de Alicante se ha saldado con 136.300 ERTE en tres meses de Estado de Alarma, mientras que en 2019 fueron 20.000; un aumento del 566%. Para el representante del Sepe en la Comunitat, los ERTE "se ha demostrado útiles operando como amortiguador de golpe social y salvaguarda de empleo, y ahora empiezan a ser un instrumento funcional para la recuperación de la actividad productiva y el empleo". En estos momentos, 80.000 trabajadores de la provincia ya han vuelto desde un ERTE a la actividad productiva.
Beneyto admite que "funciona, no sin dificultades" en tramitación o problemas con datos erróneos pero que "suscribimos acuerdos con las patronales bancarias para adelantar la transferencias a los primeros días del mes". Asimismo, también puso el objetivo en que los ERTE no son la única medida para aliviar los problemas más acuciantes para la pandemia, sino que también cuentan con los créditos ICO en las empresas o la puesta en marcha del Ingreso Mínimo Vital para las personas más vulnerables. "Entre los el primer Real Decreto del Estado de Alarma, el 8/2020 y el de la prórroga de los ERTE, el 24/2020 hay muchas medidas tomadas en esos dos meses y medios para empresas, autónomos o prestaciones extraordinarias".
