ALICANTE. Nuevo rapapolvo del Instituto de Estudios Económicos de Alicante, Ineca, a la Generalitat Valenciana. "El discurso ha cambiado muy poco respecto al año pasado, pero es que la situación sigue siendo la misma", lamentaba el presidente del instituto, Perfecto Palacio, para cerrar su intervención: el Consell sigue destinando pocos recursos a inversiones directas dentro del presupuesto, deja más de la mitad de esa partida sin territorializar (es decir, sin asignar a una provincia), y con la parte que territorializa penaliza a Alicante.
Según el análisis presentado este jueves por Palacio y el director de Estudios de Ineca, Francisco Llopis, la Generalitat suspende en transparencia: de los 510,9 millones de euros que destina a inversión directa, apenas un 2,6% del presupuesto (excluidas las empresas públicas y fundaciones, que no territorializan sus cuentas), solo se asigna a la provincia donde se va a ejecutar el 44% (224,8 millones), menos de la mitad. "El actual Consell tiene un importante margen de mejora", señala Palacio, "tener el presupuesto tan poco territorializado va contra la transparencia".
El presidente de Ineca destaca que las dos consellerias que deben ser "palanca" de la política autonómica y garantizar la igualdad entre todos los valencianos, Sanidad y Educación, territorializan solo el 31% y el 38% de sus inversiones, respectivamente. "No entendemos por qué si una Conselleria (Vivienda y Obras Públicas) es capaz de territorializar el 75% de sus inversiones, el resto no lo son". "La indefinición equivale a improvisación", advierte.
La segunda gran crítica a las cuentas de la Generalitat para 2018, al margen de su escasa transparencia territorial, es el trato que dispensan a Alicante. "El Consell ha corregido mínimamente la inversión territorializada", admite Palacio, pero la provincia recibe menos de lo que le correspondería tanto por población como por PIB. Este año serán 72,9 millones de euros, un 32,4% del total de la inversión territorializada, lo que supone cuatro puntos y medio menos (10,3 millones de euros de déficit inversor).
"Hemos expresado en distintas ocasiones que sufrimos una infrafinanciación al cuadrado: no tiene sentido que aquello de lo que se queja la Generalitat respecto al Gobierno, luego lo haga con la provincia de Alicante", critica Palacio. A la luz del análisis de Ineca, resulta que en toda la serie histórica analizada (desde 2008, cuando se fundó el instituto), invariablemente, la provincia con más PIB per cápita, Castellón (21.662 euros por persona, frente a 17.563 euros en Alicante) es también la que más inversión recibe (85,79 euros por habitante, frente a 39,72 por alicantino).