ALICANTE. En noviembre de 2017, un trabajador de Helados Alacant sufrió un accidente laboral en uno de los silos de la empresa que le costó la vida. La inspección posterior del Invassat detectó una serie de deficiencias preventivas en los silos y, en marzo de 2018, emitió un informe con recomendaciones técnicas para solventarlas. La Inspección de Trabajo levantó acta de infracción en agosto de ese año.
Dos años después, ante una nueva denuncia, la empresa heladera de San Vicente del Raspeig recibió una segunda inspección de Trabajo, poco antes del confinamiento, que constató que no se habían aplicado dichas recomendaciones, por lo que el inspector levantó una segunda acta de infracción y propuso una nueva sanción, en este caso de 35.000 euros, según la documentación que ha podido consultar este periódico.
Finalmente, la empresa ha resuelto las deficiencias detectadas por el Invassat tras el accidente mortal de 2017, según confirman las fuentes consultadas por Alicante Plaza, tras la segunda inspección de la autoridad laboral. Además de cambiar el procedimiento para los operarios que acceden al silo, medida que se tomó inmediatamente, se han resuelto también las cuestiones técnicas que reclamaba el Invassat.
No obstante, esta subsanación ha llegado después de que la empresa fuese sancionada por segunda vez al no haber aplicado las recomendaciones del organismo de seguridad laboral emanadas de su informe de 2018. Según la propuesta de sanción de Trabajo, emitida en marzo, los representantes de la empresa admitieron no haber adoptado las medidas preventivas reclamadas porque hay un procedimiento judicial en curso (tras una demanda de la familia del empleado) y consideraban que la juez podría pedir una reconstrucción.
Un argumento que no aceptó el inspector de Trabajo, al considerar que mantener la actividad en la empresa en las mismas condiciones suponía perpetuar el riesgo, en base a una hipotética petición judicial. En este sentido, la propuesta de sanción destaca que "no existe norma procesal que permita la perpetuación de un riesgo contra la seguridad manteniendo la actividad laboral a resultas de una reconstrucción de los hechos".
Tras indicar a la Inspección que no era posible la subsanación inmediata de las deficiencias preventivas por estar la empresa en plena temporada alta (era marzo, justo antes del confinamiento por el coronavirus), los responsables de Helados Alacant decidieron no obstante agilizar la respuesta a la reclamación de Trabajo y, según confirman las fuentes citadas, en estos momentos las citadas carencias ya se han resuelto. Las propuestas de sanción de la Inspección, por su parte, tendrán que resolverse en la vía judicial.