ALICANTE. La miomectomía por histeroscopia es un tipo de cirugía que sirve para extirpar los miomas mediante incisiones mínimas.
La principal ventaja de esta intervención frente a otras técnicas para eliminar tumores uterinos es la posibilidad de dejar el útero intacto, facilitando una rápida recuperación de la paciente y garantizando su futura fertilidad.
Los miomas son un tipo de tumor, con forma redonda u ovalada, que se forma debido al crecimiento excesivo de las fibras musculares de la pared uterina.
Aunque las causas de su origen son conocidas, sabemos que existen factores que favorecen su aparición, tal y como explica el Dr. Rodolfo Martín, jefe del Servicio de Ginecología de Quirónsalud Torrevieja.
Algunas de estas causas son la edad (la miomatosis es más habitual a partir de los 40 años), la paridad (los miomas son más comunes en mujeres nulíparas, es decir, que nunca han dado a luz), la genética (cuando hay antecedentes familiares, el riesgo de formación de miomas se multiplica), los factores hormonales (en las mujeres con miomas la cantidad de estrógenos o de sus receptores uterinos está aumentada) o la obesidad.
La mayoría de los miomas se detectan en las consultas ginecológicas, mediante ecografía, durante las revisiones rutinarias. El motivo, tal y como nos explica el Jefe del Servicio de Ginecología de Quirónsalud Torrevieja, es que habitualmente su presencia no se relaciona con ningún síntoma.
"Los miomas pueden localizarse en el cuello del útero (miomas cervicales) o en el cuerpo del útero. En el segundo caso, sus consecuencias en la salud femenina pueden vincularse a su ubicación, más o menos superficial. El tipo de miomas que requiere una intervención más inmediata son los miomas submucosos, que son los que se localizan en una capa más profunda del útero y que pueden afectar al endometrio".
Muchas veces, los miomas no requieren ningún tipo de tratamiento, aunque siempre deben revisarse periódicamente.
Los expertos recomiendan eliminar los miomas cuando:
Según explica el Dr. Rodolfo Martín, durante algunos años la eliminación de los miomas se ha realizado por embolización o resecado. Sin embargo, hoy en día es más habitual la extirpación quirúrgica o miomectomía, que puede ser:
Según los especialistas del Hospital Quirónsalud Torrevieja, la miomectomía histeroscópica es la más ventajosa (la recuperación es rápida y las cicatrices mínimas), aunque únicamente se recomienda para los miomas submucosos.
La miomatosis por laparoscopia también ofrece muchas ventajas, aunque es necesario "consultar con un equipo médico con experiencia en esta técnica".
En caso de miomatosis aguda y en miomas de gran tamaño en mujeres que por edad o por sus circunstancias personales no desean un embarazo, puede recomendarse a la paciente realizar una histerectomía, aunque esto implicará la extracción del útero.
La miomectomía es una intervención que genera muchas preguntas. Sin embargo, los especialistas de QuirónSalud remarcan que se trata de una cirugía segura, aunque requiere ciertos cuidados para la recuperación total de la paciente.
La recuperación tras la miomectomía por histeroscopia es la más sencilla y la que menos complicaciones presenta: la paciente recibe el alta el mismo día de la intervención y puede recuperar sus actividades normales en 24-48 horas.
Respecto a las miomectomías por laparoscopia y laparotomía, implican hospitalización (24-48 horas en el primer caso, y entre 3-5 días en el segundo).
Tras la laparoscopia, se recomienda guardar reposo durante dos semanas y la mujer puede volver a realizar sus actividades habituales pasado un mes. La miomectomía abierta es la que mayor tiempo de recuperación requiere: 3-4 semanas sin realizar ningún esfuerzo en la zona abdominal y hasta 6 semanas para volver a la rutina habitual.
Seguir estas pautas y los ejercicios indicados después de una miomectomía abdominal es especialmente importante, ya que a la cicatrización interna del útero se suma la recuperación de la herida externa.
En todos los casos, el riesgo de aparición de nuevos miomas uterinos sigue presente, por lo que conviene que las pacientes sigan sus revisiones.
La miomectomía es una intervención frecuente en mujeres en edad reproductiva y, aunque es más habitual a partir de los 40 años, a muchas pacientes les preocupa la existencia de algún efecto secundario que pueda comprometer su fertilidad.
Puesto que implica una cirugía en el útero, se aconseja esperar un periodo de tiempo prudencial para reiniciar las relaciones sexuales tras miomectomía, siendo importante que se produzcan una vez desaparezcan las molestias derivadas de la intervención.
En caso de buscar un embarazo, la recomendación general es esperar entre tres meses y un año para consolidar la cicatrización de los tejidos uterinos, ya que, de no ser así, podría ponerse en riesgo tanto el embarazo como la salud de la mujer.
Además, tal y como nos informa el Dr. Rodolfo Martín, "dependiendo de las circunstancias y, sobre todo, si se ha tenido que profundizar para abrir la cavidad uterina con el fin de extirpar el mioma, se puede aconsejar a las pacientes optar por una cesárea, ya que la vía vaginal en un futuro parto podría ocasionar una rotura uterina".
Por último, y aunque es poco frecuente, la miomectomía también puede provocar “adherencias intraabdominales y obstrucciones en el útero y en las trompas abdominales y que sean origen de esterilidad".