Foto: Rafa MolinaALICANTE. Que siga la fiesta, pero para algunos, claro. El Hércules hubo de abonar recientemente la friolera de 229.000 euros a Aligestión en concepto de alquiler del estadio José Rico Pérez.
Suma cuyo pago se ha podido afrontar finalmente gracias a la taquilla del partido de Copa con el Barça , y cuyo pago fue reclamado judicialmente en su momento por la citada mercantil y por medio de la que Enrique Ortiz, Valentín Botella y Juan José Huerga se hicieron en 2007 con la propiedad del Rico Pérez, comprometiéndose entre otras cosas a una reforma del estadio que, si el Ayuntamiento de Alicante cuestiona abiertamente, imaginemos lo que piensan los aficionados que acuden a la instalación cada quince días.
EL HÉRCULES DEBE HOY MÁS DE 400.000 EUROS A UNA ALIGESTIÓN QUE SE LOS HA FACTURADO PUNTUALMENTE
Y lo peor es que no es la única cantidad que el club, arruinado en Segunda División B, adeuda a la citada sociedad zombi por el arrendamiento del estadio. Actualmente tiene más de 400.000 euros pendientes de abonarle: 66.000 correspondientes al curso pasado, y sobre 340.000 de las campañas 2012/13 y 2013/14. Mientras que la primera cantidad la entidad espera satisfacerla dentro del presente ejercicio, con cargo entre otras partidas a lo ingresado por la Copa del Rey o lo que se pueda 'arañar' con la ejecución provisional de la sentencia que ha estimado parcialmente su demanda contra la Sociedad de Proyectos Temáticos dela Comunidad Valenciana, a cuenta de un patrocinio correspondiente a las temporadas 2012/13 y 2013/14, lo que ocurra con la segunda queda en manos del futuro propietario del estadio ya que son derechos de crédito cuya titularidad sale a subasta junto a la del derecho de propiedad del Rico Pérez.
Pero no todo son malas noticias. Al menos parte sustancial de esos 229.000 euros (y de los más de 49.000 correspondientes al alquiler de la 2014/15 y que el Hércules sí pudo abonar) va a parar a las arcas públicas porque el Instituto Valenciano de Finanzas es el principal acreedor de Aligestión (en la lista están también, aunque con derechos de crédito inferiores la Agencia Tributaria, SUMA, el Banco CAM, el Udinese, un conocido intermediario inmobiliario de la Marina Baixa o sociedades de Ortiz y Huerga). Ahora bien, imaginemos qué hubiese ocurrido si Aligestión no estuviese en liquidación, tras no levantar el concurso de acreedores al que recurrió como'solución' en 2012 ante la reclamación del banco del Consell de la deuda de casi 18 millones de euros de la Fundación del Hércules de la que Aligestión es fiadora, si bien no se ha querido dar por enterada hasta que el Tribunal Supremo ha desestimado recientemente su último recurso...
ARRENDAMIENTO DE 25 AÑOS Y ABONANDO ANUALMENTE POR ÉL UN 7% DE LOS INGRESOS BRUTOS POR CAMPAÑA
En 2008, poco después de que la mercantil se hiciera con la propiedad del Rico Pérez, Aligestión arrendó al Hércules el estadio por 25 años y por un precio anual correspondiente al 7% de los ingresos brutos por temporada del club y habiendo de correr este con los gastos de mantenimiento.
Imaginen por un momento la cifra a pagar por alquiler con base a los ingresos de la 2010/11, temporada en la que el Hércules, en Primera División, se embolsó solo por derechos de televisión más de 17 millones de euros...
Dicho arrendamiento tiene los días contados porque el Rico Pérez sale en breve a subasta libre de cargas. Lo anterior obligará al Hércules a llegar a un acuerdo con el nuevo dueño si desea seguir jugando en el que hasta 1993 fue su estadio. Ese año, y para resolver la deuda con Hacienda y la tesorería, el Rico Pérez fue adquirido a la entidad blanquiazul por el Ayuntamiento de Alicante que hasta 2007 fue el propietario, cuando se lo vendió a Aligestión.
