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plan de vivienda pública para alquiler

El Consell promoverá 360 viviendas y pondrá suelo para otras 730 en Alicante con 130 millones

20/04/2021 - 

ALICANTE/VALÈNCIA. La Generalitat promoverá directamente 360 viviendas públicas en la provincia de Alicante, y pondrá en el mercado solares con capacidad para otras 730 viviendas adicionales con el objetivo de que las levanten promotores privados. Un parque de 1.100 nuevas viviendas destinadas al alquiler asequible a las que cabe sumar las 12 que en forma de proyecto piloto se promoverán en Alcoy y otras 56 en varios municipios de las que se encargarán cooperativas de viviendas.

Así lo recoge el Plan 2400, presentado este lunes por el vicepresidente segundo y conseller de Vivienda, Rubén Martínez Dalmau, con el que la Generalitat pretende incrementar en más de 2.400 viviendas el parque público destinado al alquiler asequible en toda la Comunitat, con un horizonte de cinco años y una inversión de 213 millones de dinero público que se elevará hasta los casi 300 con la aportación privada. 

En el caso concreto de la provincia, las 360 viviendas promovidas directamente por la Generalitat supondrán una inversión de 43 millones de euros en los municipios de Elche (139), Alicante (112), Sant Joan d'Alacant (60) y El Campello (47). En cuanto a la alianza con promotores privados, el Consell movilizará suelo por valor de 20 millones de euros, para levantar otras 730 viviendas con un valor monetario de 67 millones de euros, en los municipios de Sant Joan (553 viviendas) y Alicante (176). En total, una inversión público-privada de 130 millones de euros.

Proyectos piloto y cooperativas

Fuera de estas dos fórmulas, el plan contempla también 12 viviendas del proyecto piloto en Alcoy, con una inversión entre el suelo y la edificación de 2 millones; y otras 56 viviendas promovidas por cooperativas en Sant Joan (42) y Torrevieja (14), con la aportación de solares por 1,5 millones y una inversión total de 6,76 millones de euros

El plan pretende movilizar suelo público parado en la autonomía con el objetivo de levantar 2.457 viviendas públicas en los próximos cinco años para destinarlas a alquiler asequible. Una ambiciosa actuación que llevará a cabo tanto a través de la promoción pública por parte de la Entidad Valenciana de Suelo y Vivienda (EVha) como en colaboración con los agentes privados y cooperativas. El programa prevé una inversión público-privada de 294 millones de euros, de los cuales 213 millones serán aportados por el Consell gracias a la financiación europea. 

A la presentación han acudido alcaldes y promotores. Foto: GVA

"Queremos movilizar todo el suelo público disponible. Necesitamos que el parque público de viviendas sea una garantía de protección para la mayoría social y contrarrestrar los movimientos especulativos", reivindicó Dalmau, quien destacó que, tras más de una década, "la Generalitat retoma la construcción de vivienda protegida en solares públicos, bajo los principios de la eficiencia y el ahorro, con el doble objetivo de combatir la emergencia climática y reorientar el sector de la construcción".

Un 10% para víctimas de violencia

De acuerdo con los datos que dispone el departamento que dirige Dalmau, en la Comunitat Valenciana existen solares parados con una superficie total de 115.292 metros cuadrados. De esta forma, este proyecto prevé la construcción por parte de la Administración de 1.131 nuevas viviendas, mientras que la colaboración público-privada permitirá levantar otras 1.326. Además, del total de inmuebles de obra nueva que se prevé sacar al mercado, el 10% se reservará para mujeres víctimas de violencia de género.

Los inmuebles se crearán en diferentes municipios de la Comunitat Valenciana, en concreto, en las tres capitales de provincia y en Sant Joan d'Alacant, Elche, El Campello, Oliva, Torrent, Borriana, Gandia, Almassora, Alcoi, Benaguasil, Manises, Silla, Torrevieja, Albaida y Alzira. En total, 1.155 viviendas de nueva planta se ubicarán en la provincia de Alicante; 1.110 en la de Valencia y 192 en la de Castellón.

Por su parte, Puig destacó la necesidad de encontrar "soluciones estructurales" al problema de la vivienda. "Este plan es una potente respuesta a la emergencia, dará un respiro a miles de familias y reactivará el empleo, con un impacto económico esperado cercano a los 880 millones de euros", remarcó. El jefe del Consell advirtió que la "concentración urbana trae cambios, como el encarecimiento de la vivienda y muchas dificultades para los jóvenes" y, por ello, apeló a "remodelar los barrios y facilitar la reconversión de la construcción con parámetros más justos, más ladrillo sostenible, más innovación, más sostenibilidad y más cohesión territorial".

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