VALÈNCIA (EP/C.G.). El Institut Valencià de Cultura (IVC) ha iniciado el proceso para relevar a los actuales directores adjuntos de Artes Escénicas, Música y Audiovisual, cargos ahora ocupados por Roberto Garcia, Marga Landete y Francesc Felipe, respectivamente. El Consejo de Dirección del organismo cultural dio este miércoles luz verde a las bases que regirán el proceso, según han confirmado a Europa Press fuentes de la Conselleria de Cultura y ha podido confirmar este diario, que han agregado que próximamente se publicarán en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).
Con esto se inicia una nueva etapa en uno de los máximos organismos culturales de la Generalitat Valenciana, una etapa que estará marcada por una cultura “blanca” sin “contenido ideológico”, tal y como expresó el propio vicepresidente primero y conseller de Cultura, Vicente Barrera (Vox), en una entrevista concedida a Culturplaza esta misma semana, entrevista en la que acusaba a los mencionados directores adjuntos de haber diseñado programaciones “politizadas” durante sus años en el organismo.
“Si usted ve la programación del IVC, mucha de ella ha sido politizada durante todos estos años. No creemos que sea justo, lógico ni asumible que con el dinero de todos se haga política y se intente colonizar conciencias. Nosotros creemos que la cultura, cuando además está pagada con dinero público, no tiene que ser un medio político. Y esto es lo que se ha hecho desde estas tres direcciones artísticas o hemos entendido que se ha hecho. Queremos ir hacia una cultura blanca, donde no sea un arma de colonización de conciencias y de adoctrinamiento político”. Preguntado por algún ejemplo de esa programación politizada se limitó a señalar: “No le quiero dar un ejemplo concreto de esto o de aquello, porque ahí está la programación y la puede observar cualquiera”.
Fue el pasado mes de octubre cuando este diario desveló las intenciones de la nueva Conselleria de Cultura de cesar a los tres directores adjuntos, manteniendo, eso sí, al director general del IVC, Abel Guarinos. El cese llega cuando todavía quedan años para que finalizara su contrato, plaza a la que accedieron a través de una convocatoria pública y con un proyecto aprobado por el propio Guarinos. Dos de ellos, de hecho, continuaban en el cargo tras una reciente prórroga de su contrato. Tal es el caso de Marga Landete y Roberto García, pues ambos accedieron a sus puestos en el año 2017 con un contrato que fue renovado por el Consejo de Dirección del IVC en 2022 por otros cinco años. En ese mismo año accedió a la dirección adjunta Francesc Felipe, también con un contrato por cinco años.
El goteo de ceses y renuncias dejan un escenario inédito en la Generalitat, que todavía tiene por cubrir dos direcciones adjuntas del IVC, la dirección artística del IVAM y del Centre del Carme o el director musical de Les Arts, entre otras plazas vacantes