TORREVIEJA. El balón pasa de un tejado a otro y abajo, esperando a que éste caiga, se encuentra la plantilla del Hospital Universitario de Torrevieja. Por un lado, el comité de empresa denuncia que la Conselleria de Sanidad no está tramitando -como indican las normas de reversión- las solicitudes para autorizar modificaciones contractuales y por tanto no respetar el convenio laboral firmado en septiembre de 2020. Ribera Salud -la mercantil que gestiona el departamento de salud de Torrevieja- no ha cumplido con estas normas, las recurrió en los tribunales, y no ha trasladado la documentación requerida. El juzgado ha fallado en su contra y tiene hasta el 31 de este mes para cumplir. Entre ella, la relación de todo el personal. Y como tercer actor, la conselleria se justifica alegando que si no tiene esa información no puede autorizar las solicitudes presentadas. Este es el escenario a siete meses de que finalice la concesión y pase su gestión a manos de la conselleria.
La cláusula siete de las normas de reversión, -las trasladó a la empresa en octubre del año pasado- indica que para cualquier cambio o modificación en materia de contratos que se prolonguen más allá del 15 de octure de este 2021 -fecha en la que finaliza la concesión-, Ribera Salud tiene que pedir permiso a la conselleria y ésta autorizarlo.
Alberto de Rosa, consejero delegado y en representación de Torrevieja Salud UTE, ha trasladado en los últimos tres meses 16 solicitudes -concentradas de forma mensual- para resolver en materia de contratación. Tres se remitieron el 26 de enero, nueve el 22 de febrero y cuatro el 12 de marzo. Entre todas ellas hay peticiones de adaptación horaria para el cuidado de menores, ampliación de excedencia, entre ellas para el cuidado de menores, prejubilaciones, ampliación de la jornada laboral tras la finalización del periodo reducido, y también contrataciones con carácter indefinido e interino. El comité exige con especial premura la autorización para la adaptación de la jornada de una víctima de violencia de género.
Algunas de las solicitudes remitidas en enero, llegaron a la administración de Ribera Salud en octubre y diciembre. Entre el perfil profesional de las solicitudes se encuentran personal de enfermería de urgencias, quirófano y uci, técnicos de uci y médicos especialistas.
Fuentes consultadas en la conselleria explican que sin disponer de toda la información referente a la plantilla no pueden autorizar nada. Al comité no le es válido esta explicación, que califican como "excusa", también empleada para no dar a conocer con qué fórmula quedará la reversión a manos públicas y bajo qué condiciones quedará la plantilla.
Desde el comité también denuncian lo que describen como "huida de personal". Temen, como según añaden que ya hay casos, que la incertidumbre ante esta situación provoque la carencia de personal. "Nadie quiere venir a Torrevieja si le ofrecen un contrato hasta octubre" señalan desde el comité. Ponen como ejemplo la situación del departamento de radiología. Debería estar compuesto por 12 o 13 radiólogos, afirman, mientras que hay cinco puestos efectivos. El resto se completa con una empresa externa y la contribución de otros profesionales. "Si esto sigue así, va a afectar a la calidad asistencial".
El comité rehúsa posicionarse en cuanto a si apoyan o no la decisión de conselleria de no prorrogar la concesión. Recriminan al área encabezada por la consellera Ana Barceló la ausencia de información y de diálogo entre ambas partes y denuncian que incumpla el convenio de los trabajadores. Sobre el incumplimiento de Ribera Salud de las normas de reversión, declinan posicionarse y presionar a la mercantil. "Nuestra función es defender a los trabajadores, y en esa guerra no vamos a entrar".
El comité mantiene, como viene haciendo desde hace dos semanas cada jueves, las concentraciones a las puertas del centro hospitalario para exigir a la conselleria que les comunique la fórmula en la que quedará la plantilla. El 31 de este mes se concentrarán a las puertas de conselleria.
El pasado 24 de enero, el que fuera comisionado del Departamento de Salud de Torrevieja, José Antonio García Gómez, presentaba su dimisión tras hacerse público que se vacunó contra la covid-19. García Gómez argumentó que lo hizo dentro del plan de vacunación establecido por el propio hospital, hecho que confirmó la gerencia en un comunicado. No obstante, dimitió para, señaló, no dañar la imagen de la conselleria. Fuentes consultadas en Sanidad aseguran que están buscando el perfil adecuado para desempeñar este puesto y susituir a García Gómez.