ALICANTE. El candidato del Partido Popular (PP) Luis Barcala ya es oficialmente el nuevo alcalde de Alicante para el mandato 2019-2023, tras ser investido con el apoyo de los 9 concejales de su partido y los 5 de sus aliados de Ciudadanos (Cs). Era el resultado previsible tras el pacto de investidura y de formación de gobierno formalizado poco después de las 19:30 horas de este viernes, en el que también se incluye el control de la Diputación.
Los nueve concejales del PSPV-PSOE, por su parte, han apoyado a su propio candidato, Paco Sanguino. Y esa situación se ha replicado en el caso de los dos ediles de Unides Podem EU, que han votado a Xavier López, y de los dos regidores de Compromís, que se han decantado por Natxo Bellido. Lo mismo ha sucedido con los dos ediles de Vox, que han votado a su propio candidato, Mario Ortolá.
Así, el candidato popular se ha convertido en primer edil como cabeza de lista de la candidatura más votada en las elecciones municipales del 26 de mayo, al no haber alcanzado los 15 votos entre 29 posibles que marcan la mayoría absoluta.
Con el sustento asegurado de Cs, el gobierno de Barcala dependerá de que Vox no se posicione junto a los tres partidos progresistas para poder aprobar las iniciativas que se debatan en el pleno. Los dos ediles del partido de Santiago Abascal serán claves para decantar la balanza en el caso de que PSPV, Unides Podem EU y Compromís (con un total de 13 ediles) formen bloque frente al bipartito PP-Cs (14 concejales). En esos supuestos, el dúo formado por Barcala y Mari Carmen Sánchez (la vicealcaldesa y líder de Cs) necesitará como mínimo de la abstención de Vox. Solo así podrá sacar adelante acuerdos por mayoría simple.
Con todo, lo cierto es que a lo largo del último año, el PP ha conseguido aprobar hasta unos presupuestos municipales con el respaldo de grupos políticos de la oposición, de modo que podría repetirse esa fórmula del consenso en lo sucesivo a lo largo de este nuevo mandato en las iniciativas que puedan elevarse para la consideración del pleno. Por lo pronto, el primer edil ha señalado, en el discurso de investidura, que su intención es mantener la línea del diálogo y buscar el consenso.
Además, ha prometido que establecerá una línea de colaboración con el Consell, aunque ha advertido que eso no supone dejar de reivindicar cuestiones pendientes para la ciudad como la ejecución de infraestructuras o la llegada de inversiones cruciales. En su discurso, también ha agradecido el respaldo de sus socios de Cs y ha garantizado que combatirá cualquier atisbo de corrupción política.
Así, como también había apuntado en su intervención previa a la hora de defender su candidatura, ha reiterado su apuesta por mejorar las condiciones de todos los barrios y ha subrayado su compromiso para que este mandato se despeje finalmente la ejecución del Parque Central sobre los terrenos liberados de la vías del ferrocarril. En esta línea, ha incidido en otro de los temas centrales en los que se ha focalizado la campaña electoral: la situación del servicio de limpieza viaria. Así, ha garantizado la inversión pendiente de 4,5 millones en renovación de maquinaria y la redacción de un nuevo pliego para convocar un nuevo concurso más ajustado a las necesidades reales.
El ya nuevo alcalde se ha referido, asimismo, a la necesidad de generar nuevas oportunidades para la creación de puestos de trabajo, en lo que ha incidido en su apuesta por favorecer la implantación de empresas dedicadas a las nuevas tecnologías. Todo sin olvidar otros sectores tradicionales, como el turismo.
Barcala no ha olvidado la referencia a la necesidad de conciliar la actividad del sector del ocio con el derecho al descanso de los residentes, en alusión a los problemas asociados al fenómeno conocido como tardeo en puntos concretos como las calles del Centro Tradicional.
En todo caso, Barcala ha incidido en que este mandato es decisivo para sentar las bases del futuro de la ciudad y ha invitado a todos a sumarse en ese proyecto común. Ha subrayado que su puerta estará abierta siempre a las propuestas de todos.
La nueva corporación queda formada por los siguientes 29 ediles.
Por el PP: Luis Barcala Sierra; Carlos Mazón Guixot; Julia Llopis Noheda; María del Carmen de España Menárquez; Manuel Jiménez Ortiz; Antonio Peral Villar; Manuel Villar Sola; José Ramón González González y Lidia López Rodríguez.
Por el PSOE: Paco Sanguino Oliva; Trinidad Amorós Fillol; Miguel Millana Sansaturio; Lara López Pérez; Raúl Ruiz Corchero; Dolores Vílchez López; Manuel Marín Bernal; Llanos del Mar Cano Ochando; y Manuel Martínez Martínez.
Por Cs: Mari Carmen Sánchez Zamora; José Luis Berenguer Serrano; Antonio Manresa Balboa; Adrián Santos Pérez Navarro y María Vicenta Conejero Requena.
Por Unides Podem EU: Xavier López Díez y Vanessa Romero Algaba.
Por Compromís: Natxo Bellido Suay y Sonia Tirado González.
Y por Vox: Mario Ortolá Martínez y José Juan Bonet Durá.
En los discursos previos al momento de la votación, los seis candidatos han defendido sus posiciones en orden de menor a mayor representación política, en función de los resultados obtenidos en las elecciones del pasado 26 de mayo.
Así, el candidato de Vox, Mario Ortolá, ha sostenido que "hoy no toca hablar de partidos, toca hablar de Alicante". Después, ha señalado que "los alicantinos merecen una ciudad limpia y que no esté a la cola de todos los rankings nacionales, además de una administración eficaz" Y ha pedido "que la política municipal no sea espacio de revanchismos". Por último, al nuevo alcalde le ha advertido que Vox estará vigilante para que los intereses de los partidos políticos, jamás estén por encima del interés general de los alicantinos.
El candidato de Compromís, Natxo Bellido, ha señalado que "no nos fiamos de la derecha que nunca ha atendido a los intereses de la mayoría" y ha prometido una oposición firme. "Sabemos donde nos ha colocado la ciudadanía", ha dicho, en alusión a las posibilidades que se habían planteado para tratar de explorar una mayoría alternativa, formada por PSPV y Cs, a las que Compromís decidió no contribuir si se planteaban en términos de "un intercambio de cromos" entre el Ayuntamiento y la Diputación. Además, ha recordado el pasado de presunta corrupción del PP y ha reprochado a la alianza PP y Cs que se dedique a formar un bloque contra el nuevo Consell del Botànic.
El candidato de Unides Podem EU, Xavier López, ha lamentado que nadie haya atendido a su propuesta de mesa de diálogo para alcanzar un acuerdo programático que pudiese conformar un bloque mayoritario alternativo para apartar al PP de la Alcaldía, bajo el liderazgo del PSOE. Después, ha confiado en que no pueda producirse una reducción de derechos, ante la incorporación de Vox a la vida política municipal, y ha reclamado medidas para mejorar las condiciones de vida de los barrios.
La candidata de Cs, Maria del Carmen Sánchez, ha señalado que hoy se inicia una nueva etapa para Alicante y que su propósito será trabajar por todos los alicantinos. "El Ayuntamiento ha sido fuente permanente de crispación política en los últimos años, de luchas fraticidas que no tienen nada que ver con la obligación del servicio público", ha dicho. Así, ha prometido diálogo y ha asegurado que es "una mujer de palabra". "No seremos una comparsa muda", ha añadido. Su reto, según ha dicho, será "dotar a Alicante de una voz propia" para reclamar inversiones pendientes y "acabar con el bloqueo institucional" para afrontar cuestiones como la mejora de la limpieza municipal. También se ha referido a la eliminación del gasto supérfluo y a la necesidad de que exista transparencia.
El candidato del PSPV-PSOE, Paco Sanguino, ha propuesto revertir la imagen de Alicante afectada por la corrupción y ha brindado a Cs un pacto con la posibilidad de sumar 18 concejales para "regenerar la vida política en la ciudad". "Les ofrezco este acuerdo porque creo sinceramente en que son un partido de centro" y "estoy convencido de que no mienten" a la hora de defender principios como la diversidad, la igualdad de derechos o la igualdad de género. "Les ofrezco un acuerdo para que se sumen a una mayoría de progreso liderada por mí y les animo a que lo tomen porque la oportunidad es hoy y quizá sea irrepetible", ha concluido. Con el resultado de la votación de la investidura, se ha demostrado que ese pacto resultaba del todo imposible.
El candidato del PP, Luis Barcala, ha recordado que asumió la Alcaldía hace un año tras "el fracaso de un tripartito de izquierdas". Después ha considerado que los alicantinos han valorado el trabajo desplegado durante el último año al convertir al PP en la lista más votada en las municipales del 26 de mayo, lo que, según ha considerado, le legitima para presentarse como candidato a la Alcaldía. "Lo que vale es la voluntad de la mayoría expresada en las urnas", ha dicho, "y me presento con la voluntad de continuar con la tarea que iniciamos". En esta línea, citando a Aristóteles, ha señalado que lo que se necesita es un gobierno práctico, no un gobierno perfecto. También ha reiterado que mantendrá su política en busca de consenso, como la que ha aplicado en el último año.
Acto seguido, ha reivindicado el acuerdo suscrito con Cs que "ha antepuesto el interés general al de los partidos". "Vamos a poner todos los recursos al servicio de los alicantinos; les prometo trabajo y no cejar en buscar soluciones a todos los problemas de la ciudad", ha recalcado.