Operarios en las obras de un residencial en el PAU-1 de Alicante, este martes. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. El turismo residencial será uno de los sectores cuya importancia estratégica para la economía de la Comunitat defienda el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en la aplicación de las primeras fases del desconfinamiento que podrían llegar a mitad de mayo. Para ello, el Consell quiere cargarse de razones y ha pedido a la asociación de promotores alicantinos, Provia, que aporte datos adicionales a los que se abordaron en la reunión telemática del pasado viernes, según ha podido saber este diario.
Como adelantó Alicante Plaza el sábado, Puig se ha comprometido con los dirigentes de Provia a defender ante Pedro Sánchez que uno de los criterios para permitir cierta movilidad cuando se relaje el actual estado de alarma sea el de venir a España a firmar la compra de una vivienda nueva. Para ello, el sector esgrimió la importancia para el PIB de la Comunitat de permitirles culminar la cadena de valor: 2.500 millones de euros en viviendas que hay que entregar a compradores extranjeros este año, de los que 2.000 son en la provincia de Alicante.
La propuesta, que Puig ha hecho suya, se pondrá sobre la mesa en la reunión de la conferencia de presidentes (ya una cita habitual los domingos) que se celebre al final del actual periodo del estado de alarma, prorrogado hasta el 9 de mayo, cuando los mandatarios autonómicos aporten sus propuestas diferenciadas para plasmar el desconfinamiento en cada territorio. Y para ello, Presidencia ha pedido a los promotores alicantinos que aporten datos adicionales que evidencien la importancia del negocio inmobiliario y la posibilidad de permitir con todas las medidas de seguridad necesarias el cierre de las operaciones pendientes.
Las promociones en marcha en la provincia de Alicante (unas 9.000 viviendas) que volvieron a la actividad después de Semana Santa, tras el confinamiento reforzado, siguen adelante con normalidad, según las fuentes del sector consultadas por Alicante Plaza. Las obras están observando las medidas preventivas (elementos de protección, distancia entre personas...) en base a sus respectivos planes de seguridad, y "con toda la prudencia" han recuperado el ritmo perdido en las dos semanas de cierre.
En cuanto al impacto de la crisis del coronavirus en los precios, más allá de ventas que se puedan perder, las fuentes del sector consultadas por este periódico descartan que puedan producirse grandes alteraciones en los precios. La estabilidad estaría garantizada, al menos este año, gracias al gran volumen de preventas cerradas para 2020 a estas alturas del año. "Lo que había que hacer este año, ya está prácticamente hecho", indican. De esta forma, el precio al que se concertó la venta de la vivienda cuando se realizó la reserva 'blinda' el valor del mercado al menos durante los próximos meses.
Una idea que coincide con el análisis del mercado realizado por el director general de la promotora Alibuilding, José Antonio Izquierdo, la pasada semana. Tal como publicó este periódico, la promotora de los fundadores de Goldcar, con 400 viviendas en ejecución en estos momentos entre Alicante y Madrid, ha cerrado la venta del 10% de las viviendas de su torre en Benidorm desde que se decretó el confinamiento. La mayoría, precisamente, a compradores extranjeros cuya movilidad defenderá Puig a petición de Provia.
