ALICANTE. La marca de calzado Skechers trae los primeros síntomas de recuperación de la actividad comercial en la céntrica avenida de La Rambla de Alicante: uno de los ejes que se ha visto marcado con mayor intensidad por el asentamiento de sucursales bancarias o de negocios hosteleros, de la mano de varias franquicias de comida rápida.
El aterrizaje de la tienda de zapatos de la firma de origen estadounidense se producirá en el edificio Generali, justo en el local en el que se situaban las oficinas de la conocida aseguradora, en la confluencia entre La Rambla y la calle Gerona. En la actualidad, Skechers ya cuenta con una tienda de artículos de fuera de temporada en el centro comercial The Outlet Store de San Vicente, pero no dispone de establecimiento propio en el casco urbano de Alicante.
La nueva tienda cubre, así, el hueco dejado por la aseguradora, antigua propietaria de todo el inmueble hasta que, como publicó Alicante Plaza, se cerró su venta por plantas a cinco inversores particulares en octubre de 2017.
Los nuevos propietarios pretendían dar un uso diferenciado a sus propiedades, hasta entonces fundamentalmente ocupadas por oficinas (salvo algunas viviendas de renta antigua, situados en las últimas alturas).
En principio, Generali barajaba su permanencia en el bajo comercial, pero varió de planes y abandonó el local a principios de año. Igualmente, se contemplaba la continuidad de la tienda de artículos 24 horas. No obstante, lo cierto es que la tienda de Skechers se asentará también sobre su antiguo local para conformar un establecimiento de mayor tamaño.
La llegada de la tienda de calzado supone la ruptura de una dinámica de cierres de comercios, que vivió uno de sus últimos episodios con la marcha de la tienda del reconocido modisto Pepe Botella. De hecho, tras su apertura, el de Skechers será uno de los cuatro establecimientos comerciales puros de la avenida, junto a la tienda de Ale-Hop, la de Zaalc y la joyería Gomis.