ELCHE. El Camp d'Elx sigue siendo un atractivo no solo en lo que respecta a su paisaje natural, también por las posibilidades de actividades económicas en las que la parte rural es un valor añadido. En este caso, dos particulares quieren promover un restaurante en Perleta, entre la carretera de la pedanía hacia a Balsares y la de Santa Pola. En una parcela de 19.000 metros cuadrados, donde la explotación de la actividad supondría un total de 7.200 metros, contando ajardinamiento y zona exterior.
No obstante, para que la actividad llegue a buen puerto tiene que obtener la Declaración de Interés Comunitario (DIC), ahora en trámite. El restaurante supondría, cerca de un conocido como La Finca, sería un inmueble en forma de 'L', cuya actividad se realizaría en planta baja, planta piso y sótano. Eso sí, se prevé la posibilidad de colocación de carpa en la zona de restauración al aire libre, según climatología y comensales. El diseño, de Antonio Moll Arquitectura, cuenta con colores y texturas predominantes en la zona, buscando una sintonía con las viviendas rurales del entorno y el paisaje mediterráneo.
Las actuaciones y adecuación del terreno se pretenden con el mínimo impacto ambiental, no se prevé ningún tipo de vallado de la parcela, se evitarán materiales ajenos al medio rural, tales como asfaltados y limitando pavimentados, potenciando los senderos o caminos necesarios de tierra o grava. La parcela está virgen, con unos pocos árboles que se mantienen, y con la opción de algunas plantaciones temporales o estacionales para potenciar el efecto de reforzar la apreciación de ubicación en medio rural. El total del edificio sería de 511 metros cuadrados, y la posible carpa de 264.