Una de las últimas promociones que ha empezado a comercializar Maisa en El CampelloALICANTE. El sector inmobiliario sigue deparando buenas noticias económicas para la provincia de Alicante, efectos colaterales del Brexit aparte. Todos los indicadores apuntan a una recuperación cada vez más evidente del sector en la Costa Blanca (viviendas iniciadas, compraventas, precio...), y los datos sobre transacciones del primer trimestre del año no hacen sino confirmarlo. Según los datos oficiales recopilados por el Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca), las compraventas de vivienda en la provincia durante el primer trimestre del año 2018 ya superan las que se registraron en el mismo periodo del año 2008.
La comparativa no es baladí, pues hace una década fue precisamente cuando estalló la burbuja inmobiliaria tras el aviso de la quiebra de Lehmann Brothers seis meses antes. Las compraventas de vivienda ya se resintieron ese ejercicio respecto al anterior, pero no fue hasta 2009 cuando el mercado se desplomó en la provincia. Así, lejos aún del dato en el primer trimestre del año 2007 (más de 15.000 operaciones), la compraventa de viviendas en Alicante ha vuelto en el primer cuarto del año en curso a los datos precrisis en número de transacciones: 10.121 operaciones.
Este dato, tal como destaca el director de Estudios de Ineca, Francisco Llopis, es superior a la que se registró para el mismo periodo del año pasado en un 20,1%, lo que significa que el sector inmobiliario crece en Alicante prácticamente el doble que la media del conjunto de España, donde el incremento de transacciones fue del 11,6% para el mismo periodo. Además, se acumulan seis años consecutivos de incremento en el primer trimestre del año, después de que la actividad tocase fondo en los primeros tres meses del ejercicio 2012, el peor de la serie.
La Costa Blanca, tal como sucedía al cierre del ejercicio 2017, ocupa la tercera posición provincial, por detrás de Madrid y Barcelona, en número de compraventas de viviendas, seguida por Málaga que contabiliza 8.116 ventas, según los datos de Ineca. "Las operaciones registradas en Alicante en el primer trimestre del 2018, 10.121, superan a las registradas en el mismo periodo del 2008 que fueron 9.863 operaciones", destaca Llopis. Es decir, se han vendido un 2,6% más en este trimestre que en el mismo periodo de hace una década, justo antes del batacazo del sector.
No obstante, "la composición de estas operaciones es radicalmente distinta atendiendo a si es vivienda nueva o no", señala Llopis. "En el año 2008, el 47,2% de las ventas eran de vivienda nueva, y en 2018 tan solo 14,7% para el caso de la provincia de Alicante". Es decir, hay muchas más transacciones entre particulares con la vivienda usada como protagonista. Aunque lo cierto es que la situación no es exclusiva de la provincia, según los datos de Ineca: en 2008 la obra nueva protagonizaba el 47,5% de las operaciones, y en este primer trimestre supone solo el 17,8%.
En cuanto al peso específico del sector inmobiliario de Alicante en el conjunto de España, el 'ladrillo' sigue aportando una cuota de mercado muy superior a la de otras industrias de la provincia, y también supera significativamente otras variables como la poblacional o la aportación del PIB, que rondan el 3 o el 4%. "En marzo, las operaciones de Alicante representan el 7,8% del total nacional, pero si contamos desde enero, este porcentaje se eleva hasta el 7,9%", destaca Llopis.
