ELCHE. El primer autobús 100% eléctrico ya está integrado en la flota de autobuses de Elche. Es el primero de los ocho autobuses eléctricos que se sumarán en 2023 y que se añaden a los 28 híbridos que hay actualmente, por lo que el 57% de la flota ya es "ecológica", explica la responsable de Movilidad Sostenible, Esther Díez.
El vehículo, con tres packs de dos baterías (de 140 kW), se carga en aproximadamente cuatro horas y tiene autonomía para un día. Del mismo, construido por Solaris con un coste de 495.000 euros (casi 4 millones los 8 en total), la edil destaca también que "tiene bajísimas emisiones acústicas". Se utilizará de forma inmediata para las distintas líneas del municipio y se utilizará para hacer pruebas de cara a los próximos 7 autobuses que se irán incorporando a lo largo del verano. Este autobús tiene un total 420 kW/hora disponibles de energía, que ofrece una autonomía de hasta 275 kilómetros entre las cargas. Desde el servicio, Ángel Andreu y el grupo Avanza estudiaron qué vehículo utilizar para la explotación, ya que se realizan habitualmente unos 215 diarios, por lo que permite "cubrir con total garantía la explotación".
El segundo 'pack' de cuatro autobuses extra que se añadirán este año permitirán llevar a cabo la reestructuración general de la línea con el estudio que se realizó desde Autobuses Urbanos, y que incluye la nueva Línea M por ejemplo o la conexión del entorno del campo de fútbol. Todo con una inversión que cabe recordar que viene de los fondos europeos Next Generation y que van acompañados de otras inversiones aprobados como la construcción de una electrolinera en la Estación de Autobuses o la digitalización del servicio que facilitará el pago con tarjeta. Estos últimos son cambios que se irán introduciendo progresivamente en el servicio durante el verano.
En total, en este 2023, con los 8 buses, se reducirán 1.642 toneladas de dióxido de carbono y en particular cada uno reducirá 80 toneladas de CO2 anuales. "Esto nos sitúa como uno de los sistemas de transporte público avanzados de este país. Para este gobierno es fundamental apostar por la movilidad sostenible, herramienta más poderosa para luchar contra la emergencia climática y que propicia el derecho a respirar un aire más limpio". En el plano social también ha destacado lo transversal del servicio y la mejora de la infraestructura "desde los carriles bici hasta las plataformas de accesibilidad para las paradas, los carriles bus y cómo no la reducción del 50% del precio del abono".
Respecto a la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), el Ayuntamiento está modificando el proyecto tras el decreto del Gobierno de diciembre por las nuevas exigencias. Paralelamente se están adquiriendo aparatos permanentes para medición del aire tanto para los barrios de la ciudad como para las pedanías. Es una primera fase, ya que después las posibles medidas se toman en base a estos datos "y las circunstancias que existan en cada momento", explica Díez. Recuerda que la situación del aire "no es preocupante" pero que hay margen de la maniobra y que el objetivo es quedar por debajo de lo que recomienda la OMS para la calidad del aire.
"No está previsto que haya restricciones cotidianas en el municipio" esgrime la concejal, apuntando que los peores momentos son por las olas de viento subsahariano. Pero la ZBE se concibe como una iniciativa global "dentro del impulso de la movilidad sostenible". Se instalarán cámaras para mejorar la gestión del tráfico, y sobre todo se impulsarán "políticas de movilidad sostenible" en puntos que son más contaminantes o suelen obtener peores registros, como pueda ser Vicente Blasco Ibáñez.