El alcalde, Luis Barcala, en una comparecencia ante los medios.ALICANTE. El equipo de Gobierno de Alicante, compuesto por nueve concejales del Partido Popular (PP) y cinco de Ciudadanos (Cs), mueve ficha tras la sentencia que condena al ayuntamiento a acordar la declaración de Zona Acústica Saturada (ZAS) en las calles del Centro Tradicional, y toma nota de la posición expresada por la Asociación de Locales de Ocio (Alroa) en asamblea, con la convocatoria de un primer encuentro a tres bandas para tratar de alcanzar una solución.
Por lo pronto, fuentes municipales han adelantado este jueves que el alcalde, el popular Luis Barcala, convocará para principios de la próxima semana una reunión entre todas las partes afectadas por la reciente sentencia del ruido en cuanto se disponga de las conclusiones del informe solicitado a los letrados de la Asesoría Jurídica Municipal, "como sucede cada vez que se pronuncian los tribunales en sentencias que pueden afectar al Ayuntamiento de Alicante".
Según las mismas fuentes, al encuentro asistirán los concejales y los técnicos de las áreas afectadas por la sentencia de la ZAS. Es decir, los responsables de Medio Ambiente, Urbanismo, Ocupación de Vía Pública y Seguridad. Por parte de la Asociación de Vecinos del Centro Tradicional -el colectivo que interpuso el contencioso por vulneración de derechos fundamentales- participará un representante, acompañado de los servicios jurídicos de la asociación. Y esa misma premisa prevalecerá para los representantes de Alroa, que podrán asistir a la reunión con un portavoz y sus respectivos servicios jurídicos.
La convocatoria del encuentro se produce un día después de que la asamblea de Alroa acordase mantener una entrevista de trabajo con el primer edil para solicitar que el Ayuntamiento presente recurso de apelación contra la sentencia en defensa de los cerca de 2.000 puestos de trabajo ligados a la actividad del ocio y la hostelería en el Centro de la ciudad, según precisaron sus representantes.
