ALICANTE. Si no media una fracaso político, que no lo parece, la ciudad de Alicante tendrá la próxima semana un nuevo plan de usos del centro tradicional y del centro histórico. Y, ademas, lo debe tener si no quiere caer en otro fracaso mayor: debe aprobarse antes de 24 de agosto, ya que la suspensión de licencias vigente no se puede prorrogar más. La Junta Local de Gobierno ha aprobado este jueves el documento sobre el que debatirán los grupos políticos: en síntesis, los nuevos planes parten del documento que dejó casi listo el anterior Gobierno del PSOE, pero que nunca acabó ni contestó las alegaciones que se presentaron.
Como reza el texto, el objetivo de las modificaciones del plan es evitar el incremento de locales de ocios susceptibles de generar molestias o que se extiendan bien al centro tradicional o al casco antiguo. Y en caso de que haya nuevas aperturas, que sea de forma ordenada y sostenible.
La gran novedad entre el plan vigente y el nuevo que presumiblemente se aprobará es la densidad de los locales autorizados en cada uno de los planes. Así, mientras que en el anterior plan (la primera iniciativa del tripartito de izquierdas, de agosto de 2016) se contemplaban un máximo de tres establecimientos en un radio de 70 metros; ahora no hay límite de número de locales, sino de distancia, que se rebaja a 50 metros de radio. Y, ¿cómo se calcula ese radio?La puerta del local será el centro de ese círculo que tendrá 50 metros de radio. Esa la distancia que marca el límite entre locales dedicados a una misma actividad.
En el anterior plan también contemplaba una superficie mínima del interior del local de 50 metros (con terraza exterior mayor a ese número de metros), y ahora se elimina con el objetivo de que se regule en la ordenanza de veladores.
Incluía todo el casco antiguo más las calle San Isidro, Plaça de Sant Cristòfol, Zaragoza y Nelson Mandela.
Se establecen dos grupos de tipologías de establecimientos. En el grupo I están los restaurantes, café-bar, cafeterías, ciber-café, cines, museos, salas de de conferencias, salas polivalentes, gimnasios, ludotecas y actividades recreativas y de azar, y salas de banquetes. En el grupo II, cafés-teatros, discotecas, pubs, salas de fiestas, salas de baile, salas multifuncionales, salas de exhibiciones especiales y salón lounge.
Las medidas restrictivas se aplican en el grupo II y prevén varios condicionantes: la distancia; debe haber una distancia mínima de 50 metros entre establecimientos del mismo grupo; todas las instalaciones deberán contemplar el nivel de ruido no supere el nivel ruido vigente; para la licencia de nueva apertura o ampliación se exigirá que el local esté en buen estado constructivo y en condiciones de seguridad; las actividades del grupo I (restaurantes, café-bar, cafeterías, ciber-café, cines, museos, salas de de conferencias, salas polivalentes, gimnasios, ludotecas y actividades recreativas y de azar) se autorizarán sólo en planta baja; las del grupo II (salones de banquetes, pubs, cafés-teatros, discotecas, salas de fiestas, salas de baile, salas multifuncionales, salas de exhibiciones especiales y salón lounge) podrán autorizarse en edificio exclusivo.
Por último, quedan prohibidos todas las actividades en solares. Las modificaciones no afectan a las que están ya en funcionamiento ni a las transmisiones de licencias que se realicen.
Incluye el centro tradicional más las calles Médico Pascual Pérez, Teatro, Duque de Zaragoza, San Ildefonso, Tío Cuc, López Torregrosa, Avenida de la Constitución y Castaños.
En el caso del centro tradicional queda establecido que para el uso comercial se aplicará lo fijado en el artículo 95 del PGOU; las oficinas se permiten en planta baja, piso o edificio exclusivo; y el uso de alojamiento temporal en edificio exclusivo.
En cuanto a actividades, también se establecen dos grupos, que vienen a ser los mismos que en el caso del plan del casco antiguo. Los del grupo I (restaurantes, café-bar, cafeterías, ciber-café, cines, museos, salas de de conferencias, salas polivalentes, gimnasios, ludotecas y actividades recreativas y de azar y salas de banquetes). Se permiten en planta baja o en planta baja y piso, siempre que la actividad esté vinculada. En edificio exclusivo sólo se permiten cines, teatros, museos, salas polivalentes y gimnasios.
En el grupo II, se fijan los mismos condicionantes que en el plan especial del casco antiguo: la distancia mínima queda fijada en 50 metros de establecimientos del mismo grupo, no líneales, sino en forma de circunferencia, cuya medida se toma desde la puerta del local.
Con la elaboración de ambos planes, quedan contestadas todas las alegaciones que se presentaron y ahora queda a expensas del respaldo de los grupos. En un principio, el PP cuenta con el respaldo del PSOE y de Ciudadanos y de los dos concejales no adscritos. Más dudas tienen tanto Compromís como Guanyar.
El Partido Popular ha querido sacar pecho de la gestión y aprobación, pese a que parte del trabajo se realizó en la etapa del PSOE. Así, los populares alegan que esta modificación se realiza después de que "se encontrara paralizada desde principios de año tras la falta de iniciativa del anterior gobierno" y "se evita la caducidad de la suspensión de licencias que está prevista para el 24 de agosto por la extinción de la última prórroga".
Ahora, una vez resuelto en la Junta de Gobierno Local, la modificación se llevará a Comisión de Urbanismo de este viernes y se someterá a votación en Pleno Extraordinario que se convocará para el próximo lunes 13 de agosto.
La modificación, que afecta concretamente al artículo 48 del Plan Especial del Casco Antiguo y al 22 del Centro Tradicional, tendrá que ser completada con la Ordenanza del Ruido y la revisión de la Ocupación de la Vía Pública. “Con estas tres normas el objetivo final es conciliar los intereses de los vecinos y que se respete su derecho al descanso con los intereses económicos de los empresarios con establecimientos en la zona”, señala la concejal de Urbanismo, Mari Carmen de España. Para ello, principalmente se resuelve lo relativo a la distancia entre locales y se introduce un sistema de medición que no es lineal, sino radial. De esta manera, "el Partido Popular ha dado continuidad al documento base consensuado con todos los grupos que elaboró el PSOE pero que no terminó de culminar", concluye De España.