Foto: PEPE OLIVARESELCHE. Es probable que el Ayuntamiento tenga que elaborar un Plan Económico-Financiero (PEF), es decir, un plan para ajustar las cuentas de gastos e ingresos, debido a la inestabilidad presupuestaria que existe. A día de hoy está con un déficit de 17,7 millones de euros, según ha informado la edil socialista Patricia Maciá tras participar en la Comisión de Hacienda previa al pleno. Este PEF podría suponer tener que renunciar a partidas presupuestarias consignadas para que las cuentas municipales dejen de estar en negativo y se equilibren.
Una situación que llega porque el uso del remanente de tesorería aumenta la inestabilidad presupuestaria, ya que implica más gasto mientras que los ingresos son los ya previstos por las cuentas y no suele haber grandes variaciones. Hasta ahora, el equipo de gobierno ha dispuesto ya más de 15 millones de euros de los 27,5, quedando 9 millones de euros por utilizar. No obstante, Maciá advierte que hay crédito reconocido, es decir, partidas del año anterior pendientes de pagar, que se va a sufragar con este sobrante y que asciende a 1,5 millones de euros. Por lo que quedarán 7,5 millones del remanente la próxima vez que se modifique el presupuesto para el pago de estas facturas.
"El Ayuntamiento ya se ha gastado el 52% del remanente en abril y llegará al 60% las próximas semanas cuando se paguen estas facturas", ha señalado la edil, quien se muestra "preocupada" por este uso, considerando que es "arriesgado" porque precisamente ya están en vigor las reglas fiscales por parte del Gobierno, aunque aún se desconoce cómo afectan. La situación de inestabilidad no es nueva, de el anterior mandato también contó con varios millones de déficit anuales, sin embargo, no se tuvo que recurrir al PEF porque las reglas fiscales estaban suspendidas. La edil apela al informe de Intervención, que advierte de esa inestabilidad, y por ello los técnicos del Estado recomiendan amortizar deuda o destinar estos remanentes al pago de facturas.
Por su parte, en la comparecencia de la pasada semana el edil de Hacienda Francisco Soler no aclaró si se va a utilizar todo el remanente, aunque anteriormente había dicho que debían ser prudentes. De hecho, el plan de estimación a tres años enviado al Estado señalaba que en este 2024 se amortizarían diez millones de euros de deuda. Cuestión que ya no sería posible con lo que queda del remanente.
Por último, la concejal ha querido reseñar por una parte que la ejecución presupuestaria del cuarto trimestre asciende al 28,8%, "menor que la nuestra de hace un año, del 34,5%, con ocho millones más", motivo por el que siempre nos criticaron, aquí tienen su medicina". Y arguye que con el nuevo remanente y lo que ya había del presupuesto, las cuentas se plantan en 90 millones de euros de inversión en el Capítulo 6, "algo que será imposible de ejecutar". La edil plantea que la subida de dos millones de euros para alumbrado se destine a partidas sociales.
También estima que el incremento de partidas que se ha hecho a su juicio es "insuficiente", con 300.000 euros para los Bonos Consumo, 100.000 para emancipación o 80.000 para vacunación. Critica que se aumente en un millón de euros la partida de Fiestas, que se planta en 2,8 millones de euros, "200.000 euros más que nosotros con el suplemento que hicimos", donde por ejemplo hay subida de convenios, destacando los 100.000 euros para la Federación Gestora de Festejos Populares. También 50.000 euros más para publicidad, junto a los de Protocolo o Comunicación. Y se muestra en desacuerdo con los 134.000 euros de Visitelche para promocionar el 75 aniversario del Dogma de la Asunción para el año que viene por el cariz religioso.
