ELCHE. El sector E-16, más conocido como Finca El Arsenal por el yacimiento arqueológico que allí se encuentra, es por ahora el mayor conflicto urbanístico que se ha encontrado el actual equipo de gobierno con el palmeral, ya que una potente promoción de casi mil viviendas podría afectar al paisaje del Palmeral en tanto que es bien Unesco y Patrimonio de la Humanidad, según un informe del Ministerio de Cultura, informando desfavorablemente. Ahora es el propio Ministerio quien ha convocado tanto al Ejecutivo valenciano como al Ayuntamiento para abordar esta situación la próxima semana.
En ese sentido, será el próximo miércoles cuando se celebre una reunión entre la delegación municipal, la pata autonómica —cabe esperar que a través de la Conselleria de Cultura— y la administración central en sede ministerial, con el objetivo de encontrar una solución a este entuerto, ya que por una parte los promotores tienen unos derechos adquiridos, con unas catas realizadas, mientras que el Ministerio dijo hace unos meses que la obra iba a perjudicar a este patrimonio e instaba a no construir.
Al tiempo, los propios servicios territoriales de Cultura en la provincia, como adelantó este medio, no ven restos de valor en el yacimiento arqueológico, que según las publicaciones científicas realizadas hace años por el director de las catas, y que ha vuelto a hacer lo propio ahora, apuntan a ser el alfar de La Alcudia. Ante esto, en cualquier caso, la Dirección General de Patrimonio no se ha pronunciado todavía, teniendo en cuenta el informe del Instituto de Patrimonio Cultural de España dependiente del Ministerio. Ayuntamiento y propietarios presentaron alegaciones, así que ahora se tendrá que poner todo encima de la mesa en Madrid para encontrar una solución.
Una vez descartado el valor arqueológico del yacimiento por el servicio provincial de Cultura, el Consistorio plantea dos opciones con el palmeral, que es para ellos la cuestión más espinosa al estar protegido por la Unesco: escalonar las alturas proyectadas para aliviar el impacto sobre el palmeral y el río —como aseveran los promotores que ya está contemplado— o compensarles con suelo para llevar la actuación a otra parte, algo harto difícil, como reconocen fuentes municipales, por el volumen y la edificabilidad que requiere la actuación aprobada. Respecto a las alturas, con el PP en alcaldía se les dio 8 alturas para compensar una cesión de suelo, modificando el Plan Parcial que había sido aprobado previamente por el anterior gobierno socialista de Soler, donde se le permitían 7 alturas.
Por otra parte, en cuanto al otro conflicto patrimonial por excelencia, el Mercado Central, el Consell Jurídic Consultiu (CJC) tenía que haberse pronunciado por el expediente de resolución del contrato. Paso necesario a pesar de que su opinión no es vinculante. En cualquier caso, se le requirió al Ayuntamiento más información que no había presentado con relación a las alegaciones de Aparcisa, por lo que su fallo se va a retrasar más. Asimismo, se prevé que este órgano pida alguna documentación más respectiva a la resolución y que tendría que aprobarse en las siguientes Juntas de Gobierno.