ALICANTE. El juzgado de lo Mercantil número 1 de Valencia ha admitido a trámite la solicitud de incumplimiento del convenio de acreedores contra la promotora valenciana Nou Temple. Tal como adelantó Alicante Plaza, un grupo de pequeños acreedores de La Marina Alta presentó esta solicitud a mediados de abril, al denunciar que la promotora estaba incumpliendo el plan de pagos al que se había comprometido al salir del concurso de acreedores, en 2010.
Según ha podido confirmar este diario en fuentes judiciales, el titular del juzgado de lo Mercantil número 1 ha admitido las tres demandas de incumplimiento (pues el grupo Nou Temple está formado por tres sociedades: Grupo Temple Obras, Proyectos y Desarrollos Urbanísticos S.L.U.; Promociones Nou Temple S.L.U.; y Temple Servicios Inmobiliarios S.L.U.) y ha otorgado un plazo de diez días a las concursadas para que presenten sus alegaciones.
Tal como ha venido contando este diario, la denuncia se presentó a punto de cumplirse el séptimo año desde que Nou Temple logró aprobar el convenio de acreedores, que incluía una quita del 50% de la deuda y el pago del resto en ocho años, con dos de carencia. Es decir, falta un año para que termine el plazo y, según estos acreedores, la promotora no ha hecho frente al pago de las cantidades que les adeuda.
Los demandantes son Hermanos Franco Movimientos y Excavaciones S.L., Excavaciones Marzá S.L., Francisco Roselló Roselló, Tajomar Construye S.L., Roselló y Cabrera S.L., Construcciones Cuello y Sendra S.L., Carpintería Royo Blázquez S.L., Arena y Azahar S.L., Máximo Moncholí Ricart, Hermanos Espinosa Llosa S.L. y Euroextremeña de Montajes Industriales S.L. La mayoría son pequeñas empresas que trabajaron para Nou Temple en sus promociones de la zona de la Marina Alta, donde se han quedado paralizadas obras en Dénia, Xàbia, Jesús Pobre y Els Poblets.
No obstante, como ha desvelado Alicante Plaza, el fondo de inversión Aiqon Capital, que en 2014 compró a Catalunya Caixa la deuda de Nou Temple dentro de un paquete de fallidos, ha remitido al juzgado un escrito para adherirse a la solicitud de incumplimiento de los acreedores, mientras el Banco Santander estaba estudiando si seguía sus pasos. Tanto estas dos entidades como uno de los administradores concursales y la propia Tesorería General de la Seguridad Social, entre otros acreedores, han pedido al juez que reclamase a la empresa el pago de las cantidades comprometidas, dado que no estaba cumpliendo con sus compromisos. Sin embargo, el titular del juzgado de lo Mercantil respondió a los denunciantes que, en todo caso, podían instar una liquidación anticipada.
Una resolución que podría darse ahora en función de las alegaciones que presente la promotora valenciana y si finalmente se convoca una vista para dilucidar el supuesto incumplimiento del convenio que denuncian los acreedores. Éstos pretenden que el juez señale una vista en la que se aborde por qué la promotora valenciana está incumpliendo el plan de pagos, que podría desembocar en la citada liquidación anticipada si se concluye que la firma no puede hacer frente al calendario establecido.
El grupo Nou Temple se convirtió en una de las promotoras más destacadas de la Comunitat a mediados de la pasada década, cuando protagonizó una intensa actividad tanto en la región como en Cataluña y Baleares entre 2006 y el estallido de la burbuja inmobiliaria. El excapitán del Valencia C.F. David Albelda se convirtió en la imagen publicitaria de sus promociones. Con la crisis, la promotora de Vicente Flames entró en concurso en junio de 2008, pero logró superarlo con un convenio aprobado dos años más tarde, cuyo plazo de cumplimiento vence en junio de 2018. Cuando solicitó el concurso, se quedaron paralizadas una treintena de promociones y un millar de viviendas.