Un camión del servicio de recogida de la basura, en plena operativa.ALICANTE. El servicio de limpieza viaria, recogida de la basura y tratamiento de residuos de Alicante se encarrila definitivamente hacia un cuarto modificado del contrato con el fin de implantar la recogida selectiva del residuo orgánico. Como mínimo, por lo que respecta al volumen de rechazo generado por los grandes productores: hoteles, restaurantes y cafeterías (las actividades asociadas al canal horeca). El equipo de gobierno, el bipartito compuesto por PP y Cs, trata de acelerar la definición concreta de la propuesta, que conllevará el consiguiente incremento de costes, con el propósito de que ese nuevo servicio pueda comenzar a aplicarse en el margen de cuatro meses.
¿Por qué entonces? Porque en ese plazo, debe haberse despejado qué tipo de fórmula se decide aplicar para mantener los tres pilares de la prestación (limpieza, recogida de residuos y su tratamiento), una vez extinguido el contrato actual, adjudicado a UTE Alicante (FCC, Ferrovial, Inusa y Cívica). Dicho contrato, adjudicado en 2013 por ocho años de duración (aunque con dos posibles prórrogas de dos años cada una), vence este mes de septiembre. Así que la planificación que mantiene el departamento de Limpieza es hacer coincidir esa prórroga (sea cual sea su naturaleza jurídica concreta) para introducir nuevos cambios. Entre ellos, al margen de la recogida selectiva del residuo orgánico -exigida por la normativa europea-, también se prevé facultar a la UTE para que subcontrate con alguna entidad con fines sociales el servicio de recogida del residuo textil que ahora desempeña la fundación Proyecto Lázaro a través de un convenio que expira precisamente ahora.
De hecho, el área de Limpieza acaba de garantizar que Proyecto Lázaro seguirá a cargo de ese servicio durante los próximos cuatro meses, tras adjudicarle la tarea a través de un contrato menor, según se concretó este miércoles en un encuentro informativo celebrado con el conjunto de los grupos de la oposición.
¿Cómo se organizará la recogida selectiva del residuo orgánico? Como ya ha informado este diario, el departamento de Limpieza que coordina el edil Manuel Villar (PP) baraja dos sistemas alternativos, en función de cómo se concrete la prórroga del contrato. Así, en el caso de que pueda optarse por la implantación de la recogida selectiva a toda la ciudad, se prevé recurrir a la recogida puerta a puerta solo para la hostelería mediante el uso de camiones de carga trasera, de menor tamaño y, en consecuencia, con mayor capacidad de maniobra para acceder a calles estrechas.
Para el resto de la ciudad, se procedería a la recogida a través del depósito en contenedores específicos. Se ha previsto el despliegue de más de 2.000 contenedores en todos los barrios y las dos partidas rurales más pobladas. Y, además, se ha trazado 11 rutas de recogida para retirar esos residuos con camiones de carga lateral (de mayores dimensiones).
¿Qué sucedería si no se acordase una posible prórroga que incluyese la implantación del servicio de recogida selectiva al unísono en toda la ciudad? En ese caso, según fuentes consultadas, se trataría de implantar solo en el canal horeca y en una única ruta de las once previstas.
En principio, todo parece indicar que el diseño definitivo de la operativa podría darse a conocer en el seno de la nueva comisión específica planteada por el conjunto de grupos políticos representados en el Ayuntamiento para tratar sobre el futuro del servicio. Esa segunda comisión (en abril se cerró la primera, sobre el cumplimiento del contrato actual) comenzará a rodar en el mes de junio, después de que, este miércoles, el equipo de gobierno haya aceptado la propuesta de creación formulada por PSOE, Unides Podem y Compromís para su debate en el pleno celebrado la semana pasada.
El equipo de gobierno y la oposición pactan ahora elevar al pleno de mayo la propuesta para crear una segunda comisión sobre el futuro del servicio rechazada "por falta de consenso"
En esa sesión, PP, Cs y Vox rechazaron la iniciativa al considerar que la propuesta no se había consensuado. Eso sí, el edil de Limpieza apuntó entonces que se celebraría una reunión de inmediato para tratar de alcanzar un acuerdo. Y el pacto se habría perfilado este mismo miércoles: la propuesta de las tres fuerzas progresistas se volverá a plantear en el pleno de mayo con algunas modificaciones a introducir por el área de Limpieza con el fin limitar el alcance público de la información relacionada con los pliegos de los nuevos contratos. Además, en ese encuentro, también se informó a los grupos opositores sobre los posibles emplazamientos que las concejalías de Limpieza y Urbanismo estarían barajando para situar los tres nuevos ecoparques que se prevé construir para mejorar los porcentajes de recuperación y recliclaje de residuos. Entre ellos, figurarían una parcela en las inmediaciones de San Nicolás de Bari, sobre la Vía Parque; otro en Babel y un tercero en los PAU de Playa de San Juan. En todo caso, Villar apuntó que se había redactado un proyecto tipo de ecoparque que pudiese resultar adaptable con facilidad a cualquier emplazamiento.
Con todo, el acuerdo en torno a la nueva comisión sobre el futuro del servicio, y la información sobre el resto de asuntos relacionadas con la prestación, no evitó que PSOE, Unides Podem y Compromís escatimasen en críticas frente al bloqueo de su propuesta inicial para crear dicho grupo de trabajo. En primer término, el edil socialista, Raúl Ruiz, consideró que "el bipartito llega cada vez más tarde, pero valoramos positivamente que el equipo de gobierno se sume ahora a quienes queremos que se siga fiscalizando la contrata de limpieza. Pudieron hacerlo en el último pleno, pero nos alegramos de que por fin entren en razón", añadió. Además, emplazó a PP y Cs a "dejar de perder el tiempo y presentar un Plan Local de Residuos que acumula ya más de cuatro meses de retraso respecto a lo que indica la ley". Todo pese a que, según fuentes consultadas, el propio Villar ya señaló, en el transcurso de la reunión, que dicho plan saldrá a exposición pública en breve para la presentación de alegaciones.
Sea como fuere, en segundo término, la edil de Unides Podem, Vanessa Romero, añadió que "la nueva comisión de limpieza se aprobará este mes y sin apenas modificaciones. El señor Villar ha retrasado el proceso un mes sólo para ganar tiempo y tratar de justificar su pésima gestión. Un mes que vamos tarde, que nos acerca más a una prórroga, a pago de certificaciones fuera de contrato, tal como pasó en tiempos de Castedo", recalcó. Así, insistió en que "esta contrata es de las más caras e importantes en nuestra ciudad, y que estamos ante la tónica habitual del Partido Popular: oscurantismo, pagos millonarios fuera de contrato, y un llegar tarde a todo que afecta, antes que a nadie, a la ciudadanía alicantina".
Por último, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, también lamentó que se haya producido "un retraso innecesario" en la constitución de la nueva comisión, aunque se felicitó de que, finalmente, "haya primado la cordura y se haya aceptado la propuesta que planteamos durante el pasado pleno, sujeta a pequeñas modificaciones", concluyó.
