ELCHE. Compromís ha seguido este miércoles valorando la intensidad del pleno del martes en el que PP y Vox votaron en contra de la moción por los derechos de las personas LGTBIQ+, al tiempo que el alcalde Pablo Ruz denunciaba ataques homófobos a su persona por un millar de pegatinas que se llevan viendo desde hace algo más de un mes por la ciudad. Esther Díez lamenta que el bipartito votara en contra "de una moción en defensa de los derechos del colectivo LGTBI. Ayer se vulneraron los derechos y libertades de todos estos ilicitanos ilicitanos porque su gobierno consideró posicionarse en contra de la defensa de sus derechos".
La portavoz apunta a que lo que se proponía no era de cosecha propia sino acciones de personas expertas en la materia de diversidad e igualdad y contra la lgtbifobia. Díez defiende que lo que se estaba planteando en la moción eran "campañas de sensibilización en los medios de comunicación, pedir al Generalitat Valenciana que haga efectivas la ley LGTBI y la ley trans, de las más avanzadas en Europa o instar al Gobierno central a alcanzar un pacto de Estado contra los discursos de odio". Además del apoyo al Día del Orgullo, pidiendo que se despliegue la bandera arco iris en la parte central del Ayuntamiento o recuperar partidas eliminadas.
La portavoz también se mantiene en la crítica al PP porque "no justificó su voto en contra, es absolutamente injustificable y hay que decirlo" y porque Ruz asintió, según Díez, cuando Vox hablaba de "chiringuitos" respecto a colectivos LGTBI locales. Díez considera que el alcalde "se ha equivocado de enemigo en este tema", aludiendo a que no se presentaron pruebas respecto a las pruebas de que esas pegatinas son de la izquierda. Compromís incide en que se muestran "contundentes" en su condena de una manera "rotunda y enérgica" a la campaña contra Ruz. Aunque eso sí, lamentaba la portavoz al tiempo que paralelamente lanzara una campaña en redes sociales por las pegatinas "en la que además se utilizaba mi propia imagen y a mí esto me parece absolutamente intolerable". Se queja de que les vinculen directamente e incidía en que el PP no ha apoyado ninguna ley sobre la cuestión LGTBI en las dos última décadas.
Preguntado sobre la cuestión, el regidor incide en que no tenía previsto intervenir, pero que no podían apoyar una moción después de que desde Compromís señalaran "que no respetamos los Derechos Humanos" —si bien esta apreciación se refería más a Vox en contestación a la "ideología" LGTBI—. Ruz destaca una vez más que no tenía prevista la intervención, pero cree que "hay límites", y que no pueden ir con quien les dice que no apoyan los DDHH.
Con todo, Ruz valora la postura de Compromís y el apoyo tras las pegatinas. Indica que había preferido llevar con discreción esto pero finalmente lo hizo público en el pleno. No se queja de los de Esther Díez pero sí se muestra muy decepcionado con los socialistas, "quienes han hecho moda, ridiculizando con que son cuatro pegatinas de nada". Y recuerda que en situaciones parecidas, o de agresiones a miembros de la corporación o sedes, ellos han mostrado siempre su solidaridad. Considera una "afrenta" todo lo sucedido y habla de nuevo de "frentismo", excluyendo a Compromís, pero cree que esto le da la razón con lo afirmado en el pleno. Que las pegatinas son del entorno de la izquierda.
Poco después de que el regidor hiciera estas declaraciones en la mañana del miércoles, el portavoz Héctor Díez asegura que condenan este hecho, "condenamos todos los actos de homofobia y de xenofobia que se puedan producir en nuestra ciudad. Y en el caso de las pegatinas que han aparecido lo es y, por tanto, lo condenamos también". El portavoz entiende que las políticas contra las agresiones de lgtbifobia "son fundamentales para parar esta lacra que existe contra las personas LGTBIQ+ y lo que no se entiende es que el alcalde vote en contra de, precisamente, la moción que se estaba debatiendo que promovía la condena de los ataques de homofobia y abogaba por la educación como pilar fundamental para que no avance en la sociedad este tipo de ataques totalmente deleznables".
Por último, sí que declara que "nadie se ha mofado de nada ni de nadie. Quien realmente no ha sido coherente con lo que dice y lo que hace es el propio alcalde, que denuncia un ataque contra él y acto seguido no vota lo que precisamente está denunciando. Ni siquiera enmendó la moción". Recuerda que en 2021 presentaron una moción contra la lgtbifobia y Ruz votó a favor, "¿qué ha pasado desde ese día a hoy? Quizá es que gobierna con Vox y se ha mimetizado con la ultraderecha".
Para acabar, sobre las "cuatro pegatinas", Díez denuncia que ellos llevan soportando insultos de PP y Vox en los últimos meses. "Hemos tenido que soportar insultos del tipo ‘carroñeros’, ‘traidores’, ‘filoetarras’, ‘sinvergüenzas’, ‘gandules’, ‘corruptos’, ‘cómplices de los violadores’, ‘puteros’ y ‘cocainómanos". En ese contexto de la dialéctica, para hacer referencia a estos insultos, justifican que se usó esta expresión de "4 pegatinas" sin pretensión de menospreciar absolutamente ningún acto homófobo.